Un año más pasamos el puente de Todos los Santos en el Pallars, pero este año la cosa pintaba muy diferente, no nos ibamos a resignar solo a comer castañas y panellets al lado del fuego mientras pensabamos cuando llegarían los primeros fríos, este año ibamos a esquiar!
Una vez aparcados en el parking de la cota 2000 y después de disfrutar de la sinuosa carretera y de los paisajes otoñales, nos calzamos los esquís y empezamos la subida.
Mucha gente calzando esquís, raquetas o simplemente con trineos disfrutando de la nevada.
Poco a poco fuimos subiendo por la pista Bellavista, pista muy llana y con unas vistas increíbles de gran parte del Pirineo, pero que en el día que nos ocupa se vieron reducidas por la típica nune del Pic de l’ Orrí.
Algunas más antes de coronar en el repetidor.
Algunas más de la bajada, nosotros bajamos por la pista del estadi, pero miraras donde miraras todo estaba rallado, por cierto durante la bajada nos lució el sol y pudimos disfrutar del descenso al 100%.
Una vez llegados al parking, la imagen era plenamente invernal con un parking lleno al completo.