Sí, hay centros del sistema sanitario público andaluz con habitaciones con tres o más camas. Así se lo reconoce por escrito la titular de Salud de la Junta, Marina Álvarez, a varios diputados autonómicos del PP-A que se habían interesado por ese asunto. La consejera explica que la mayoría de las instalaciones que las tienen son «hospitales regionales y de especialidades, ubicados en edificios antiguos», con «importantes limitaciones estructurales» para remodelar las salas; y que «pertenecen a determinadas unidades asistenciales muy específicas». En el resto de su contestación, accesible en el BOPA, Álvarez se centra en Sevilla, para detallar la situación de las tres áreas hospitalarias que disponen de la tercera polémica cama. Por lo que respecta a la del Virgen del Rocío, anota que las habitaciones triples se dan en ella «sólo en situaciones puntuales» en las que «se produce una alta frecuentación de pacientes» y se habilitan hasta estabilizarlas. En cuanto al ámbito del Virgen Macarena, la consejera asegura que se han marcado «como objetivo prioritario conseguir reducir el número de camas» por estancia. Para ello «se ha realizado un plan de eliminación de la tercera», que está previsto desarrollar por fases y, eso sí, «en función de la disponibilidad presupuestaria» que exista. En el marco de esa propuesta de actuación, la Junta prevé «medidas de gestión» que permitan disminuir lo que califica de «número de estancias evitables», además de «reubicar fuera de las salas de hospitalización toda la actividad que no sea asistencial, con objeto de aumentar el número de habitaciones disponibles». Junto a ello, «está prevista la construcción de dos salas más», de las que no da más detalles. Alude por último al área de Valme para sostener que desde 2015 se ha reducido el número de habitáculos triples «en un 80%», descenso que continuará en 2018, si bien, «en periodos de alta frecuentación», se activará la posibilidad de utilizarlos. Con todo, lo descrito no sería lo mayoritario ya que, según el Gobierno regional, «el 70 por ciento» de los hospitales del sistema sanitario público cuentan con cuartos de uso individual o doble.
