Un Barcelona-Real Madrid nunca es un partido más e igual a otros, pero es que para Lopetegui, el encuentro de mañana es además, una final, el encuentro que define su porvenir en el banquillo blanco. Sólo una victoria contudente le dará vida, el resto le condena. Lo sabe él y no puede evitar los nervios y la tensión. Si hasta ahora el entrenador había mantenido un tono neutro en casi todas sus comparecencias ante la prensa, en la de esta mañana se le ha visto más tenso que otra veces, evidentemente consciente de que él es quien más se la juega de todos los protagonistas: “Voy a seguir respirando después del encuentro de mañana, no me voy a morir. Cada uno tiene un 100% de energías, y el 100% de energías están enfocadas a ayudar a mi equipo a hacer un gran partido”, ha dicho el entrenador blanco cuando le han preguntado si había vida después de jugar contra el Barça. Se le ha preguntado si se siente cuestionado: “Me centro en lo único que es trabajo de entrenador, no estoy muy pendiente de lo que dices tú u otro, sino centrados en potenciar las cosas que nos ayuden a mejorar y prepararnos para un partido”, ha asegurado, pero le han continuado preguntando: “El ciento por ciento de mi energía lo dedico al fútbo, no me desgasto ni un 0,001% en otras cosas”. Pero cada vez se oye un vestuario más tenso cuando habla con la Prensa, como Marcelo el martes: “Son situaciones que favorecen vuestro trabajo y muy poco el nuestro. Veis el fútbol desde una orilla y nosotros desde otra. Lo que me interesa de Marcelo, Sergio y de todos es ver que están trabajando bien.”
Antes de ese adiós o no del entrenador, se tiene que jugar el encuentro. En el Barcelona falta Messi, por primera vez en 35 duelos entre los dos máximos rivales, pero al entrenador del Madrid le preocupa su equipo: “Hay muchas claves en un partido como este. La primera el fútbol, atacar bien y defender bien, y el tema emocional y la mentalidad”, ha comentado el entrenador.
Julen quierer ver un poco más de luz donde los demás sólo ven oscuridad y malos presagios: !Se da por hecho que el Real Madrid está herido. En octubre hemos hecho cosas buenas y otras que no han tenido continuidad en el resultado pero sí en ocasiones de gol. Estamos preparados para afrontar la exigencia de un clásico. La actitud de mis jugadores y su mentalidad me hace estar tranquilo como entrenador para dar la vuelta a una situación que no es irreversible. Salvo en pocos partidos hemos tenido claras opciones y merecimientos para ganar”.
Para el choque de mañana, Isco y Marcelo están listos: Marcelo tuvo un golpe que le obligó a salir, pero está bien y pensamos que va a estar disponible. Isco ha salido de un periodo parado y veremos”. La duda es la banda derecha, donde Nacho, Odriozola y Lucas Vázquez se juegan un puesto.
