Sexto toro Rinconado es el último de la encerrona, número 63, negro bragado corrido, de 550 kilos, de la divisa de Cortés de Moura. Último cartucho de la tarde, al que recibe en chiqueros. Lo encela con sapiencia de salida. Fantástico el toreo a dos pistas. Ventura, en Ventura ahora. La plaza, revolucionada. Una locura con los mordiscos. Se quita el cabezal con Dólar. Soberbio el caballero. El rejón cae contrario. La plaza se viste de blanco, con fortísima petición. Dos orejas. Algunos piden el rabo. Ventura aplaude al buen toro y pasea feliz las dos orejas.
Sexto toro- Fotos: Plaza 1
Quinto toro Alfombrero, número 73, es el nombre de este miura, negro entrepelado, de 570 kilos. Diego Ventura brinda este segundo toro de Zahariche a don Pablo Lozano. Saca a una de las joyas de la corona, un caballo torero por los cuatro costados. Un espectador se arranca con un fandango entre la división. Falla en el primer encuentro. Sube luego la temperatura. Tira de espectacularidade en el broche. Rejón trasero. Oreja con petición de otra. La vuelta al ruedo es apoteósica, con varios gallos en la mano.
Quinto toro
Cuarto toro Segundo del «lote» de Ángel Sánchez y Sánchez, bautizado como Zapatero, número 31, negro, de 557 kilos. Y segunda parte de la encerrona, en la que invita a compartir banderillas al sobresaliente, Juan Manuel Munera, uno de los jóvenes rejoneadores más prometedores. Muy aquerenciado este toro. Por encima los caballeros. Mata de rejón y descabello. Palmas.
Cuarto toro
Tercer toro Garrafa se llama el tercero, número 54, negro, de 559 kilos, perteneciente a la ganadería de María Guiomar Cortés de Moura. Mansea de salida el murube. Lo encela a dos pistas con mastría, con un quiebro por dentro que vuelve a calentar la tarde. Y otro más, meritísimo, al hilo de chiqueros. Cae contraria la banderilla, pero la gente está encantada ahora. Hace una especie de media hermosina, llamémosla venturina, que deleita. Se deja tocar la montura. Cita de largo, pega quiebros en la cara. Fantástico un palo corriendo para atrás y yendo de frente luego, en la misma cara del toro. Llega luego un violín con quiebro incluido. Y otro más, con ruletas en la cara. Tres pinchazos y rejón. El acero le priva de un trofeo.
Tercer toro
Segundo toro Saldrá un miura, Asendero, número 35, negro entrepelado algo cinchado, de 494 kilos. Brinda a Fermín Bohórquez. Recibe a portagayola, garrocha en mano, a este toro, que por cierto mete la cara en el capote. Acaba con las cortas sobre Remate pero el rejón final cae muy feo. Silencio.
Segundo toro
Primer toro Aldeanito, número 22, negro, de 568 kilos, de la ganadería de Sánchez y Sánchez. Galopa y tiene movilidad, pese a mansear. Diego Ventura no está acertado en lo rejones de castigo y pasa en falso varias veces a la hora de clavar las banderillas, pero hace cosas realmente prodigiosas y conecta una barbaridad con los repletos tendidos, especialmente con "Lío". Rejón y descabello. Petición y saludos.
Primer toro
Paseíllo Con casi lleno, hace el paseíllo Diego Ventura, que mata seis toros en solitario.
Poniendo «guapos» a los caballos
Cuadra Diego Ventura ha traído a todos sus caballos estrella a Madrid. Corceles jóvenes y veteranos son observados desde esta mañana por cientos de personas mientras los enjaezan para el gran día.
Toro para hoy en los corrales- Fotos: Plaza 1
Ganaderías Los toros que se van a lidiar, reglamentariamente despuntados, ya aguardan en chiqueros. Saltarán al ruedo toros de Ángel Sánchez y Sánchez (1º y 4º), Miura (2º y 5º) y María Guiomar Cortés de Moura (3º y 6º).
Cartel ¡Buenas tardes! Bienvenidos a la quinta corrida de la Feria de Otoño. Diego Ventura es hoy el protagonista. El rejoneador se encierra con seis toros de tres ganaderías distintas en un cartel que ha despertado mucha expectación, con el añadido de no formar parte del abono obligatorio.
Apoteosis total de Diego Ventura: en su apuesta más arriesgada, llena Las Ventas, mata seis toros (dos de ellos, de Miura), es la vez número 17 que abre esta Puerta Grande. Es el primer rejoneador que ha indultado un toro; también ha cortado un rabo, en Madrid. En una tarde histórica, se confirma plenamente como el número uno. Y no ha sido fácil porque, por las dificultades de los toros y su fallos, al matar, no ha cortado trofeos hasta los dos últimos.
Desde hace años, Ventura pelea por el liderazgo con Hermoso de Mendoza; pelea a distancia, porque el navarro no acepta torear con él en una gran Feria, con televisión. Es lógico: Pablo vive su última etapa; Diego, su plenitud. Por denunciar esto, a Ventura se le cierran muchas Plazas del norte. Es el único que busca lidiar toros con más movilidad y emoción: hace poco, de Partido de Resina; esta tarde, miuras. ¿Qué aficionado podría reprochárselo?
El primero, de Sánchez, mansea y se para. Diego arriesga, en tablas y mata bien: sólo por ser el primero, no le dan la oreja, que merecía. Recibe a portagayola con la garrocha al miura segundo, que transmite emoción pero no es fácil: la faena tiene mucho mérito pero el rejón cae bajo. En el tercero, de Cortés, noble, se luce a dos pistas, con arriesgados «muletazos» por dentro y quebrando por el lado contrario: una faena completa, de dos orejas, pero mata a la tercera. El cuarto, de Sánchez, huye a tablas, deslucido: comparte la lidia con Munera, el sobresaliente. En el quinto, de Miura, codicioso, que galopa, aguanta arreones, quiebra espectacular y mata bien: oreja. En el último, de Cortés, muy noble, se desencadena la apoteosis: lo lleva prendido a la cola, a dos pistas; el quiebro, aguantando hacia atrás, es un «Sueño»; pone al público en pie al clavar a dos manos, sin bridas: dos merecidas orejas y vuelta al gran toro.
Han acudido esta tarde a Las Ventas muchos niños; para algunos habrá sido su primera corrida: no la olvidarán. El gran pintor Eduardo Arroyo, aficionado cabal, pintó el cartel de este festejo: es aficionado cabal. He recordado su frase: «Es responsabilidad nuestra, de los aficionados, sacar a los toros del hoyo en que han caído». Cuando la escuchó Ventura, hace cinco días, en Sevilla, se apresuró a decir: «Yo quiero sacar al rejoneo del hoyo en que ha caído, engrandecerlo». Busca recuperar la emoción, lidiando toros de otros encastes. En el toreo, las apuestas se mantienen en el ruedo: esta tarde, Diego Ventura lo ha hecho, engrandeciendo el rejoneo.
Postdata.
En el fallecimiento de Montserrat Caballé, cito literalmente su rotunda opinión: «A mí me gustan los toros. Mi padre me llevaba a verlos desde pequeña. No me gusta que se prohíban, porque en Cataluña hay mucha gente a la que le gustaría ir a ver una corrida y ahora se sienten frustrados. Creo en la libertad de poder ir a ver una corrida de toros. El toreo es un arte maravilloso. Estoy en contra de su prohibición». Va unida a su patriotismo: «Soy española de pura cepa, pese a quien pese. La lengua de España es la española. Siempre incluyo música española porque me entusiasma y porque el publico se vuelve loco, sea del continente que sea». La recordaré siempre, cantando uno de sus grandes éxitos: «De España vengo, soy española…»
Ventura sale a hombros - Paloma Aguilar
FICHA
MONUMENTAL DE LAS VENTAS. Sábado, 6 de octubre de 2018. Quinta corrida. Casi lleno. Toros de Ángel Sánchez y Sánchez (1º y 4º, mansos), Miura (2º y 5º, complicados) y María Guiomar Cortés de Moura (3º y 6º, nobles, con vuelta al ruedo al 6º).
DIEGO VENTURA, rejón y descabello (petición y saludos). En el segundo, rejón caído (palmas). En el tercero, dos pinchazos y rejón (palmas). En el cuarto, rejón y dos descabellos (palmas). En el quinto, rejó (oreja y petición de la segunda). En el sexto, rejón desprendido (dos orejas). Sale a hombros.