Los datos del paro de agosto en las Comunidad dejan un sabor agridulce. Castilla y León cerró el mes con 1.898 parados más que en julio, un repunte del 1,36 por ciento que deja en 141.142 el número de desempleados. Sin embargo, respecto a hace un año la Región tiene 14.671 personas menos en las listas del paro.
Por sectores, la agricultura acabó el mes con 162 parados más; la industria con 216; con diez menos en la construcción y 351 en el grupo denominado como «sin empleo anterior».
En términos relativos, el paro aumentó más en Palencia, Burgos y Valladolid, con repuntes mensuales del 4,44, 2,46 y 2,4 por ciento respectivamente, con dos puntos más en Soria, 1,61 en Segovia, 1.49 en Salamanca y el 0,04 en Ávila. Solo descendió en León y Zamora, con 111 (-0,38 por ciento) y 41 (-0,37) parados menos, respectivamente.
En el octavo mes del año se realizaron 81.577 contratos en la Comunidad, que suponen 20.892 menos que el mes anterior, con una caída del 20,39 por ciento, frente al -23,3 nacional. Además, los indefinidos cayeron un 12,8 por ciento respecto a julio, con 934 menos; y los temporales fueron 19.958 menos que el mes anterior, con un desplome casi del 21 por ciento.
En cuanto al número de afiliados a la Seguridad Social, cayó el pasado mes de agosto en 3.848 personas, es decir, un 0,42 por ciento respecto a julio, hasta alcanzar las 923.384. En la comparación anual, los cotizantes en la Comunidad se incrementaron un 1,93 por ciento, en 17.444.
Mes de transición
El viceconsejero de Empleo y Diálogo Social, Mariano Gredilla, justificó que agosto es un mes de «transición» entre un periodo anterior de creación de empleo y el final de año, que por regla general es de destrucción.
Sin embargo, invitó a analizar los datos de paro registrado en el marco de la tendencia del último año, en que se contabilizan, dijo, 14.700 desempleados menos en la Comunidad, una cifra «importante» que sitúa a Castilla y León con el mejor comportamiento en términos interanuales de toda España.
Estacionalidad
Gredilla recordó también que este mes veraniego «no ha sido una excepción a lo habitual», con muchos contratos asociados al sector servicios. Así, informó de que el incremento de 1.898 parados incorporados a las listas coinciden con los nuevos del sector servicios (1.891), que «evidencia su estacionalidad». A ello se une que en el agrario aún no han empezado los trabajos de recolección, como la vendimia, que se retrasará por cuestiones climatológicas, según argumentó.
La oposición no se mostró tan benévola con las cifras del desempleo. Así, la procuradora de Ciudadanos Belén Rosado consideró que los datos «siguen dejando datos preocupantes en temporalidad o respecto a la situación por sexos». En un comunicado, calificó de preocupante que haya 83.139 mujeres en paro por 58.004 hombres, lo que sigue evidenciando que «es necesario avanzar en las políticas de igualdad».
Por su parte, el secretario de Empleo del PSOE, Óscar Álvarez, calificó de «muy malas» las cifras conocidas, que atribuyó a la dependencia y estacionalidad del sector servicios.
Álvarez manifestó que el sector crea «empleo precario y escaso» y subrayó que nueve de cada diez empleos son temporales y tres de cada diez a tiempo parcial, por lo pidió a la Junta «revertir la situación» con apuestas para retener a las personas y evitar su marcha de Castilla y León.
Asimismo, el secretario general de Podemos Castilla y Léon, Pablo Fernández, lamentó las cifras ya que, a su juicio, «vuelven a poner de manifiesto que el modelo económico del Partido Popular condena a la despoblación y al empobrecimiento».
Los sindicatos también manifestaron su descontento. UGT denunció la desaceleración en la creación de empleo en la Comunidad y abogó por reforzar las prestaciones contributivas y asistenciales que dan cobertura a las personas desempleadas más desprotegidas y CCOO pidió, entre otras, la modificación de las normativas sobre contratación, eliminando el contrato de emprendedores y el de jóvenes.
