El jefe de Gobierno, José Ramón Amieva, descartó que la remoción de escombros del Colegio Enrique Rébsamen, que colapsó tras el sismo del 19 de septiembre pasado y donde murieron 26 personas, entre ellas 19 niños, afecte la investigación por estos hechos.
Comentó que demás el retiro de escombros no genera ningún tipo de destrucción de evidencia, ya que las investigaciones periciales finalizaron.
"Ya tenemos las investigaciones periciales, los resultados de las periciales, ya tenemos todas las actuaciones y, obviamente, todas las diligencias que ha tenido que practicar el Ministerio Público, que están en las carpetas de investigación", destacó.
El mandatario capitalino solicitó a la Secretaría de Obras realizar esta tarea "bajo la supervisión de los peritos de la Procuraduría General de Justicia capitalina".
Agregó que lo que se quitará en primera instancia "son las placas de concreto o de cemento que estaban en riesgo de desplazarse, lo estaremos llevando a cabo de manera paulatina y con mucha seguridad, sobre todo, para los inmuebles adyacentes".
Hace unas semanas, padres de familia del Colegio Rébsamen y vecinos de la colonia Oriente Coapa, delegación Tlalpan montaron guardia nocturna para evitar que una parte del inmueble fuera demolido puesto que afirmaban no se puede deshacer una evidencia fundamental que determina la causa del derrumbe.
Por la mañana llegaron al lugar aproximadamente 20 trabajadores y dos vehículos grúas para comenzar la demolición, previamente cercaron la zona como medida de seguridad.
Por el derrumbe en la escuela está vinculado a proceso por homicidio el Director Responsable de Obra, y aún no se conoce el paradero de la dueña, Mónica García Villegas.
