El tamaño del vacío de Cristiano Ronaldo está aún por medir con exactitud, pero de primeras, y sin haber pasado escuadra y cartabón, el agujero es del tamaño de cincuenta goles, que son las dianas que ha anotado por temporada en sus nueve años en el club blanco. Una cifra solo a la altura de un futbolista de otra galaxia, y cuya marcha provocará un redoble de los esfuerzos de los que hasta junio fueron sus compañeros.
La pregunta está en la calle, en los bares, en las playas e incluso en el club blanco. ¿Quién marcará ahora ese medio centenar de goles que hacía Ronaldo? A la espera de que el Real Madrid traiga una pieza de recambio para Cristiano, que en todos los casos posibles (Neymar y Mbappé están descartados) tendrá un perfil distinto al portugués, hay que mirar a la actual plantilla y ver el vaso medio lleno. O eso hace Lopetegui y el resto de su cuerpo técnico. Parece imposible que Benzema y Bale repitan una temporada tan irregular como la pasada. Solo pueden hacia arriba, no solo en cuanto a influencia en los partidos, sino también en cuanto a número de goles.
El curso pasado, entre lesiones y malos momentos de forma, los registros de Karim quedaron en unos ridículos 12 tantos entre todas las competiciones. Casi 50 partidos para esa decepcionante cantidad de dianas. Si Julen consigue volver a sacar al mejor Benzema, el ariete galo puede asegurarte unos 27-28 goles durante el curso, porque ya lo ha hechos en anteriores campañas.
En el caso de Bale ocurre lo mismo. Si las lesiones le respetan, el británico siempre ha demostrado tener olfato de gol. Solo hace falta mirar la final de Kiev. En 39 partidos jugados la pasada temporada, anotó 21 goles. Tiene capacidad para llegar a los 30 e incluso superarlo, sin duda. Solo necesita suerte y salud.
¿Y qué obligaciones tiene el resto del ataque? Pues muchas. Isco, Asensio y Lucas, aparte de continuar explotando su faceta de asistentes, deben subir su cuantía de goles unas cinco dianas más que de costumbre. También Kroos y Modric están llamados a asomarse más en el área rival y llevar el balón a la red. Y si tienen minutos, Borja Mayoral y Raúl de Tomás también son dos arietes que suelen tener una media goleadora bastante alta en relación a los minutos jugados.
No está Cristiano, y es innegable que su figura es irreemplazable, pero el Madrid tiene plantilla de sobra para entre toda ella, darle al equipo esos cincuenta goles que sin el portugués ahora necesitan nuevos protagonistas.
