La inquietud del campo por la nueva Política Agraria Común (PAC) que entrará en vigor en 2020 continúa creciendo. Para apaciguar los ánimos, la consejera de Agricultura y Ganadería de la Junta, Milagros Marcos, aseguró que no afectará a la «fuerza» y «pujanza» de un sector «dominante» en Castilla y León como el agroalimentario y añadió que el Ejecutivo autonómico peleará para que las cuantías se mantengan «al menos como hasta ahora» y que se está avanzando en este sentido.
Marcos, quien participó en Valladolid en una jornada titulada «La industria agroalimentaria comprometida con el territorio» organizada por RTVCyL, la también portavoz de la Junta alabó el buen hacer de un sector «muy competitivo» que mueve 10.000 millones de euros.
La consejera señaló allí que las exportaciones de esta industria crecieron en el último año un 7,5 por ciento, a pesar del retroceso que sufrieron en el conjunto de España; y ensalzó los más de 35.000 empleos que genera este sector, la mayoría en el medio rural, donde fija población.
Compromiso firme y decidido
En este sentido, Milagros Marcos recalcó el compromiso «firme y decidido» del Ejecutivo regional con la agroalimentación y apuntó que en lo que va de legislatura ha destinado a inversión en el sector 109 millones de euros, lo que ha supuesto una generación de empleo asociada de más de 3.000 puestos de trabajo.
Asimismo, recalcó el apoyo de la Junta a un sector «diversificado y con grandes fortalezas» que está logrando sumar a «gente joven y comprometida» con la empresa familiar como herramienta de «arraigo» en el campo, sobre todo en cultivos como el de la «remolacha y la patata» o industrial como la «azucarera y galletera».
Finalmente, en cuanto a las inclemencias del tiempo de estas semanas, la consejera aseguró que han sido «más beneficiosas que perjudiciales», aunque pidió «esperar a la cosecha» para valorar si ha sido un buen año, «a todas luces mejor que el pasado».
