El policía nacional que se atrincheró, armado, en los juzgados de La Almunia de Doña Godina (Zaragoza) se ha entregado finalmente. Un negociador policial acudió para convencerle de que se entregara sin causarse daño ni provocar un incidente más grave.
El hombre ha sido trasladado a un hospital de Zaragoza, donde ha quedado ingresado bajo custodia policial. Aunque no presenta lesión física alguna, se le está sometiendo a una evaluación psicológica.
Según indicaron varios testigos, el hombre había amenazado con suicidarse y había instó a los que estaban en el edificio a que se marcharan. Se quedó solo en el interior y poco después llegaron al lugar varias dotaciones de la Guardia Civil, que acordonaron la zona.
Como medida de precaución, se desalojaron una guardería y un colegio colindante con la sede judicial, y se procedió también al cierre preventivo de establecimientos comerciales existentes en esta céntrica zona de La Almunia de Doña Godina.
El hombre que se había atrincherado es un policía nacional destinado en la localidad navarra de Tudela.
Las Fuerzas de Seguridad pusieron en marcha el protocolo habitual en estos casos, con la intervención de un negociador para tratar de convencer a ese individuo a que depusiera su actitud. Poco antes de las 17.00 horas, el hombre acabó entregándose y fue detenido de inmediato por los agentes de la Guardia Civil.
En la zona se había desplegado un fuerte dispositivo policial, con agentes apostados en el perímetro exterior de los juzgados y en edificios de los alrededores.
