Siempre es la misma regla: cuando a alguien le prohíben hacer algo, nace inmediatamente la tentación de incumplir esa orden. Y esto es lo que le ha pasado a Thomas Markle. Tras la petición expresa del Príncipe Harry de mantener alejada a la prensa de cara a la boda real de este 19 de mayo, el padre de Meghan Markle ha colaborado en secreto con un paparazzi británico para cerrar una serie de instantáneas.
Thomas ha sido pillado haciéndose pasar por un fotógrafo y vendiendo las imágenes «robadas» por 100.000 libras, todo en colaboración con Jeff Rayner. Además, una cámara de vigilancia «cazó» a los dos, por separado, en el mismo cibercafé en el que el antiguo director de iluminación de Hollywood contemplaba una noticia sobre su hija y el nieto de la Reina Isabel II.
Thomas Markle
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Jeff Rayner
Su hijo, Thomas Markle Jr., ha anunciado que su padre se disculpará con Meghan Markle por el bochorno que le ha hecho pasar. Aunque la noticia saltó a la prensa anoche, el Kensington Palace ha preferido mantener en silencio.
La noticia salta justo la misma semana que se va a celebrar la boda real en Windsor. Después de aclarar la situación de los progenitores de la novia y confirmar que ambos asistirán al enlace, su polémica familia vuelve a copar titulares nublando de nuevo la imagen de la futura Duquesa de Sussex.
