«Hay carreras muy demandadas, como educación, administración de empresas o derecho que tienen mucho éxito pese a su bajo índice de inserción profesional. Sin embargo, en todas las de ciencias puras e ingenierías tenemos un déficit impresionante». Así se pronunció el consejero de Educación de la Junta, Fernando Rey, quien afirmó que son precisamente las segundas las que ofrecen un «empleo seguro» y que en ellas las estudiantes son la minoría.
En la fase final del concurso «Las matemáticas del planeta Tierra», del Instituto de Investigación de Matemáticas de la Universidad de Valladolid (Imuva), que clausuró, el consejero reconoció estar «preocupado» por la escasa demanda que reciben los estudios de ciencias entre los estudiantes de Castilla y León y subrayó un plan de esfuerzo en matemáticas para mejorar la metodología de esta materia en la enseñanza escolar.
Además, Rey señaló que las mujeres «siguen sin elegir las carreras de ciencias» de un modo equilibrado con respecto a los hombres, lo que genera que sean estudios y áreas profesionales «muy masculinizadas» y repercute en la brecha de género en el mercado laboral.
El concurso, que se celebró en el Museo de la Ciencia de la capital del Pisuerga contó con la participación de 60 grupos procedentes de 17 centros diferentes de la Comunidad, y 24 profesores. En total, concurrieron 125 alumnos de ESO y Bachillerato.
En el espacio expositivo se defendieron los cuatro proyectos finalistas: «Turismo matemático por Castilla y León» del IES de Guardo (Palencia); «La mía es más larga» del IP Cristo Rey; «¿Pueden las matemáticas cambiar tu suerte?», del IES Condesa Eylo Alfonso y «Matemáticas en el mundo» del IES Galileo, estos tres últimos de Valladolid.
«Ojalá este tipo de citas animen a despertar vocaciones hacia las matemáticas, las ciencias y las ingenierías», apuntó el consejero de Educación.
Por su parte, la investigadora de la UVa Guimar Martín-Herrán explicó que el objetivo del campeonato es «incrementar el interés de los estudiantes de secundaria y bachillerato por los números» y lograr «que se vean de una manera más lúdica y que no despierten miedo».
«Pensamos que son potenciales clientes para que posteriormente su interés por las matemáticas les haga estudiar una rama científica en el futuro», aseguró antes de subrayar que ésta es «una asignatura como otra cualquiera y todo el mundo es capaz de aprenderlas y entenderlas, no como se suele pensar».
