A pesar de las nubes que se ciernen sobre la bolsa americana, después de que el interés del bono americano a diez años perforase por primera vez en cuatro años la barrera del 3%, nivel que ayer mantuvo, el precio que paga un inversor por entrar al S&P 500 es, en estos momentos, el más bajo de los últimos 18 meses si se atiende a los beneficios esperados en los próximos doce meses.