Cientos de estudiantes, algún profesor y ciudadanos sin relación alguna con la universidad se han manifestado esta tarde en el campus de Vicálvaro de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid (URJC) para protestar por el caso Cifuentes.
Los convocados por el Concejo de Estudiantes Independiente, la asociación feminista Cariátides y Res Pública, que se han autocontabilizado en unos 300 asistentes, han clamado contra el supuesto trato de favor que ha disfrutado la presidenta de la Comunidad, Cristina Cifuentes, durante la realización de un máster en la universidad. Los estudiantes han pedido a gritos la dimisión de la propia Cifuentes, del rector del centro, Javier Ramos, y de todos los implicados en el caso.
Además de las consignas generales ("¿dónde está el TFM, TFM dónde estás?" o "Cifuentes dimisión"), los estudiantes han explicado por qué piden el cese de los implicados y cómo les afecta a ellos personalmente la situación.
"Todo este caso va a afectar a la calidad o al menos el nombre de los títulos que se cursan en esta universidad", opinaba Luis. A su lado, el profesor Alfonso de la Quintana, de Periodismo, apoyaba esta impresión: "Es de lógica que se vean afectados. Se va a dar siempre el típico cachondeo con los másteres de la URJC", afirmaba.
Ignacio Ruiz, estudiante, explicaba que el rector Ramos debe dimitir porque "lo único que ha hecho ha sido intentar tapar la corrupción" hasta que ya no le quedó más alternativa y tuvo que abrir una investigación y después elevar los hechos a la Fiscalía al apreciar indicio de delito. "Es muy fácil todo esto. ¿Dónde está el TFM?", se preguntaba.
De la Quintana se acercó a la concentración, en el patio central del edificio principal del campus, en solidaridad con los estudiantes y porque está "harto" de que ya solo se hable de la URJC para dar malas noticias. Algo parecido explicaban unos autodenominados "activistas", sin relación con la universidad, que acudieron a hacer bulto para demostrar su apoyo a la reivindicación.
"Pedimos limpieza, decencia", contaba Jorge Guerra. "La haces, la pagas. No puede ser que las instituciones estén al servicio de los partidos políticos", que a sus cincuenta y alguno ya las ha visto de todos los colores. Al rector los estudiantes le acusan de haberles mentido.
"Nunca ha habido un error de transcripción de notas ni nos ha pasado que nos hayamos presentado a un examen y en nuestro expediente apareciera un 'no presentado'", han afirmado los estudiantes en el comunicado que han leído.
En los corrillos, estudiantes y profesores comentaban entre sí las últimas novedades del caso, como el hecho de que la universidad se esté planteando retirar el título a Cifuentes o los bandazos de Ciudadanos respecto a la Comisión de Investigación en la Asamblea.
"No creo que vaya a dimitir, pero hay que presionar", decía una profesora en un grupo de seis docentes que acompañó la protesta. "Es muy tremendo todo lo que ha pasado y aquí no pasa nada nunca, le están haciendo un daño terrible a la institución", replicaba un compañero. Entre los cuerpos docentes lo más común es que casi nadie quiera dar opiniones con nombre y apellidos, la situación en los departamentos es de "mucha tensión" y nadie quiere exponerse, cuentan.
Tras la protesta en el patio central, el grupo de manifestantes se desplazó hasta el edificio de administración del campus, donde leyeron un comunicado lamentando la situación creada, reivindicando el esfuerzo estudiantil para sacarse los títulos en contraste con los regalos a Cifuentes y para pedir, cerca del centro de poder del campus de manera que pudieran oírles, las dimisiones de todos los implicados, desde Cifuentes hasta la funcionaria que cambió las notas, Amalia Calonge.
Próxima parada, una concentración ante la sede del Gobierno de la Comunidad de Madrid, en la puerta del Sol, el jueves 12.
