Posiblemente el de ayer fue uno de los derbis en los que los dos conjuntos llegaban a estas alturas del campeonato con escasas opciones de ganar el título de Liga. A pesar de esta circunstancia, los puntos sí tenían su importancia para la conquista del segundo puesto. El Madrid no ganaba un derbi liguero en casa desde el 1 de diciembre de 2012 y esa racha negativa continúa. Una de las claves para que no llegara el que hubiese sido justo triunfo madridista fue la gran actuación de Oblak. Pero quiero destacar la gran temporada de nuestro portero titular, de Keylor Navas.
Ideal para el Madrid
El costarricense también realizó tres grandes intervenciones. Una, fundamental en el minuto 69 a disparo de Koke dentro del área, evitando lo que muchos atléticos ya cantaban como el 1-2. Keylor sacó a relucir ahí una de sus grandes cualidades, los reflejos y su velocidad de reacción. Y, además, estuvo brillante otra vez en general y siempre muy concentrado en el juego. Quizás no sea el mejor portero del mundo, pero en mi opinión se ha convertido en el guardameta ideal para este Real Madrid.
La presión
Quiero recordar que con él, el Madrid ha conquistado 10 títulos: dos Champions, una Liga, una Supercopa de España, tres Mundiales de clubes y tres Supercopas de Europa. Son razones de peso para decir que Keylor está a la altura de los mejores del mundo. Y algo muy importante: sabe aguantar y convivir con la presión de defender una portería tan electrizante y complicada como la madridista, a veces en medio de rumores sobre fichajes para su puesto. Acaba de cumplir 31 años, la mejor edad para un portero. Keylor reúne experiencia, calidad y le quedan varios años al máximo nivel. Y se ganó el respeto del Bernabéu.
