Los primeros días de abril han traído dos noticias importantes para el sector agrario. En primer lugar, se ha publicado en el BOE la orden ministerial sobre los módulos que se aplicarán a todos los que tributan por este régimen (casi un millón de agricultores y ganaderos), en la declaración del IRPF que se debe presentar en los próximos meses correspondiente al ejercicio fiscal 2017. En total, según datos del Ministerio de Agricultura, las medidas adoptadas suponen una reducción de la base imponible de unos 580 millones de euros.
A nivel nacional se han reducido los módulos para los cereales, leguminosas, patata y fruta de hueso, así como a la ganadería extensiva, la apicultura, cunicultura y el vacuno de leche. También hay rebajas para otras producciones, como cítricos, olivar, uva, oleaginosas y forrajes en zonas concretas. La mayor parte de las reducciones impositivas se han adoptado como respuesta a la sequía que afectó el año pasado a España, que perjudicó no sólo a los cultivos, sino que también provocó falta de pasto para el ganado extensivo.
Asimismo, se han tenido en cuenta otras circunstancias, como las dificultades de mercado que atravesaron el sector cunícola, el de vacuno de leche, o el de la fruta de hueso, y la ola de frío que tuvo lugar a principios del año pasado o el calor extremo que se registró en la primavera o el verano. Además, desde el Ministerio de Agricultura han recordado que ya se publicó otra orden el pasado mes de noviembre en la que se recogía una reducción del módulo del arroz para las declaraciones de 2017 y siguientes, cuyo índice ha pasado de 0,37 a 0,32. Por otro lado, se mantiene la reducción general del 5% en el rendimiento aplicable a todos los agricultores y ganaderos que tributen en el régimen de estimación objetiva. Por último, los regantes que utilicen electricidad pueden aplicar un coeficiente corrector en el rendimiento neto de los cultivos regados.
Bruselas aporta casi todo
Por otro lado, el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para el año en curso, presentado la semana pasada en el Congreso de los Diputados con bastante retraso, no ha gustado en el sector agrario por considerar que el incremento previsto para las políticas de agricultura, pesca y alimentación, que será del 1,3 %, es muy escaso, de acuerdo con las valoraciones que han hecho las organizaciones agrarias.
En total, contarán con unos 7.500 millones de euros, aunque la mayor parte de esta cantidad procede de Bruselas. Así, se destinarán 5.800 millones de euros de las arcas comunitarias para las ayudas directas y la intervención de los mercados. También hay que destacar los 1.200 millones de euros para la política de desarrollo rural, los 59 millones destinados a la política de regadíos y el mantenimiento de 211 millones de euros para el plan de seguros agrarios. Si se suman al gasto en agricultura, pesca y alimentación, las partidas destinadas a medio ambiente y los fondos para otros programas, el presupuesto consolidado del Ministerio que dirige Isabel García Tejerina alcanza los 9.650 millones de euros.
