El deporte vivió ayer una terrible tragedia después de que el autobús que transportaba a los Humboldt Broncos, un equipo juvenil de hockey hielo, sufriera un accidente contra un camión en el que perdieron la vida 14 personas, la mayoría miembros del equipo, que incluía a 24 jugadores, todos del oeste de Canadá, con edades comprendidas entre los 16 y los 21 años, y tres entrenadores. Además está el conductor del camión. Otras 14 personas resultaron heridas, tres de ellas de gravedad. De momento la Policía no ha identificado públicamente por nombre a las víctimas, pendiente de notificárselo primero a las familias de los jugadores y del equipo técnico, que iban de camino a Nipawin para disputar un encuentro de semifinales del campeonato júnior de la provincia. La Iglesia Apostólica de esta localidad fue el lugar de reunión de muchos de esos familiares, que viajaron a la espera de noticias. Michelle Straschnitzki, la madre de Ryan, un chico de 18 años que sobrevivió al accidente, aseguró a varios medios que su hijo había sido trasladado al hospital. «Hablamos con él, pero dijo que no podía sentir sus extremidades inferiores», afirmó. También desveló que Ryan, que será sometido a una cirugía, no hacía más que preguntar por el estado de sus compañeros y entrenadores. «Ojalá tuviéramos una máquina del tiempo y pudiéramos volver 24 horas», continuó. Humboldt es una localidad de unos 6.000 habitantes. Muchos de ellos se concentraron en la pista de hielo de los Broncos. La desgracia tuvo lugar a las 17:00, hora de allí.
Kevin Garinger, presidente del equipo, dijo que era «uno de los peores días» de su vida. «Nuestros pensamientos y oraciones se extienden a las familias de nuestro personal y jugadores, y a todos los que se han visto afectados por esta tragedia», dijo Garinger. «La familia de los Broncos está en shock», añadió.
La Policía está investigando todavía las causas del suceso, ocurrido a 30 kilómetros al norte de la localidad de Tisdale cuando el autobús se estrelló contra un camión en una de las intersecciones de la carretera, según la Policía canadiense en un comunicado recogido por la cadena CBC. El primer ministro del país, Justin Trudeau, expresó sus condolencias en Twitter: «No me puedo imaginar lo que están pasando estos padres, y mi corazón está con todos los afectados por esta terrible tragedia, en la comunidad de Humboldt y más allá».
