El terrorismo continúa siendo una de las principales preocupaciones de la sociedad a nivel mundial. Las muertes y destrucción causadas por este mal global tienen un efecto directo sobre la economía de nuestro planeta. Pese a que el impacto económico del terrorismo ha disminuido en un 7% a nivel mundial durante el pasado año, es la tercera tendencia más elevada en la historia; más que en el primer pico registrado en el año 2001 tras los atentados del 11 de septiembre en Nueva York.