La hoja de ruta no va a cambiar por el momento. Así que Educación escuchará primero a la comunidad educativa, representada en el Consejo Escolar, antes de determinar si las vacaciones escolares se anclan de forma definitiva y estable a la Semana Santa. En este asunto, la «decisión podría ser política y puede tomarse sin tener en cuenta a la comunidad educativa, pero no me parece razonable», subrayó este pasado miércoles el consejero del ramo, Fernando Rey, que se mostró contundente: «Yo no voy a tomar ninguna decisión sin oír al Consejo Escolar».
Y es que a la hora de abordar esta cuestión no deberían hacerse imposiciones políticas, consideró. Por eso, apostó por el «diálogo y el consenso» y destacó que «el faro y el criterio debe ser el mejor interés para nuestros estudiantes». El máximo representante del departamento educativo volvió a hablar de las vacaciones escolares de Semana Santa después de que el presidente del PP de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, asegurase en Zamora esta misma semana que en el futuro el descanso en las aulas coincidiría con la Semana de Pasión. Algo que este año no sucederá y el próximo curso sí, por cuestión del calendario académico, pero que no está aún cerrado de cara al futuro.
Su última legislatura
Los populares ya le pidieron al consejero en las Cortes que, en la medida de lo posible, hiciera coincidir los dos periodos y este pasado miércoles Rey explicó que lo que mostró el líder del PP fue un «deseo» y «posiblemente, si en 2019 él tiene responsabilidades va a depender más de él que de mí». Una afirmación que le llevó después a confirmar que no seguirá al frente de Educación en la próxima legislatura. Sin embargo, se mostró junto a Mañueco en su propuesta: «No me parece una solución mala y efectivamente nos evitaría muchos problemas». Aún así insistió en que se debe escuchar la opinión de la comunidad educativa antes de decidir si la región, «con gran tradición» de Semana Santa, hace lo mismo que Andalucía y establece que ambos periodos vayan de la mano de forma definitiva.
Por otra parte, se refirió al periodo de matriculación en los centros educativos que arrancó este pasado miércoles. El principio de libre elección de colegio por parte de las familias «está funcionando», ofrece muchas opciones a los padres, pero también hace que los centros «compitan» en cierto modo entre ellos por atraer a un alumnado que no aumenta con el paso de los años. Por un lado existe esa especie de rivalidad, pero, por otro, estimula «para prestar mejores niveles de calidad y servicios», explicó. En cualquier caso, Rey llamó a la tranquilidad porque si por algo se caracteriza Castilla y León es por «contar con la misma calidad en la pública y en la concertada».
El consejero presentó ayer en una jornada el marco de actuación de su departamento en educación para adultos. Un área con 21.000 alumnos en la región que es «importante» para la empleabilidad, dar oportunidades a los que no pudieron estudiar y reenganchar a aquellos que salieron del sistema de forma temprana.
