La Guardia Civil está realizando registros en los domicilios y entidades vinculados a la publicidad institucional insertada para promocionar el referéndum ilegal del 1-O. También ha detenido al secretario de Comunicación y Atención Ciudadana de la Generalitat de Cataluña, Antoni Molons, según han confirmado fuentes oficiales.
La operación, enmarcada dentro del operativo «Anubis» que lidera el juzgado número 13 de Barcelona, todavía se está desarrollando en las dependencias centrales del Gobierno catalán en el centro de Barcelona. El objetivo del operativo es conocer si se destinaron fondos públicos para la consulta ilegal del 1 de octubre. También se está registrando las sede de Òmnium Cultural.
Según han señalado a ABC fuentes de esta entidad independentista, hay siete trabajadores de la entidad «retenidos» en una sala, acompañados por miembros de la dirección de la organización. «Los agentes están secuestrando correo electrónico de los trabajadores y cambiando contraseña», agregan desde la Òmium, que tiene su sede central en la calle diputación de Barcelona.
Paralelamente, esas mismas fuentes explican que la Guardia Civil no ha entrado en el domicilio particular de ningún dirigente de la «Junta Nacional» de Òmnium, tal y acomo se había aputnado en un primer momento.
A su vez, fuentes del departamento de la Presidencia de la Generalitat han explicado a este diario que la operación de la benemérita no habría llegado todavía a las dependencias de las direcciones de Comunicación del Ejecutivo autonómico y han descartado que Molons haya sido detenido. Desde el Palau de la Generalitat también han negado que se hayan producido detenciones.
Molons es alto cargo de la Generalitat desde la salida de Neus Munté de la consejería de Presidencia, cargo que abandonó por mostrarse «tibia» con dicha consulta. En el mes de noviembre, Molons ya declaró por unos asuntos parecidos, y aquella vez apuntó directamente a Jordi Turull, consejero de Presidencia.
En abril de 2017, la consejería de Presidencia –todavía en manos de Munté– insertó un anuncio en varios diarios de papel con el siguiente mensaje: «El Estado español no cumple con Cataluña». Este anuncio se publicó solo unos días después de que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, presentara en Barcelona una batería de inversiones para los próximos años en las infraestructuras catalanas.
La publicidad se insertó solo en siete diarios («La Vanguardia», «El Periódico», «El Punt Avui», «Sport», «Mundo Deportivo», «Esportiu» y «20 minutos») de cuatro únicas empresas editoras: Grupo Godó, Grupo Zeta, Hermes Comunicacions y Grupo Heraldo. El total de esta campaña mediática costó 45.680,73 euros.
