En la mayoría de los balnearios del mundo se está produciendo de forma generalizada un proceso de transformación y degradación que se muestra en buena medida irreversible, la erosión costera. Las playas de Cuba no escapan de los efectos de este fenómeno. Con más de 6 mil km de costas, el Archipiélago Cubano exhibe unas 430 playas arenosas.