El presidente de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), Juan Ignacio de Diego, calificó de «complicada» la situación de cara a la campaña de riego y consideró necesaria la «contención» en los consumos de agua en los regadíos, así como planificar «con mucho rigor» porque la nieve caída aún no es suficiente para salir de una situación de sequía. Diego se expresó así en el marco de una jornada divulgativa para dar a conocer los contenidos de la revisión del Plan Especial de Sequías de la cuenca del Duero, que inauguró en Valladolid junto al presidente de la Diputación provincial, Jesús Julio Carnero, informa Ep.
El responsable de la cuenca se refirió a la campaña de riego, enmarcado en una situación «complicada» que «invita a la contención» porque los embalses de consumo están al 36 por ciento, todavía 17 puntos porcentuales por debajo del año pasado y muchos por debajo de la media de los últimos diez. «Son números suficientemente elocuentes para una planificación muy, muy mesurada», advirtió antes de explicar que, por otro lado, la estimación de los volúmenes de nieve que hay en las cordilleras «no da para salir de la situación de sequía, que es seria», por lo que haya que seguir «ahorrando» y que «cada gota cuente».
En esta línea, el presidente de la CHD aclaró que la situación de sequía no es homogénea, ya que por ejemplo en Salamanca los recursos han bajado mucho, mientras que en León «parece» que se van recuperando a pesar de que estaban muy bajos el año pasado, aunque recordó que lo importante es la demanda a la que hay que hacer frente.
Por otro lado, ante la petición de más embalses por parte de los regantes, Diego aclaró que se trabaja en esa línea con el desarrollo de este tipo de infraestructuras que se incluyeron en la Planificación Hidrológica de 2016 en zonas deficitarias como son Las Cuezas (Carrión) y Órbigo, donde ya «sistemáticamente» se ha detectado déficit hídrico para atender las demandas.
«Detección temprana»
El documento deallado ayer contempla la coordinación con administraciones y el establecimiento de unas pautas que se puedan planificar para el seguimiento de las sequías, ya que dentro de ellas es difícil identificar el inicio, por lo tanto se trata de dotarse de una herramienta que permita una «detección temprana» que les parece fundamental, así como un seguimiento técnico «adecuado» con objeto de facilitar información a los usuarios para que puedan planificarse en su gestión, tanto explotaciones agrarias como en el caso de abastecimientos.
El plan permanecerá en exposición pública hasta el 22 de marzo y el procedimiento de revisión permitirá adecuar sus contenidos al Plan Hidrológico de la Demarcación del Duero 2015-2021. La modificación, en línea con los nuevos indicadores de sequía y escasez, incluye dos conjuntos de medidas o acciones a llevar a cabo. Por un lado, para afrontar el problema de la sequía, se proponen, entre otras, actuaciones tales como la reducción de los caudales ecológicos al mínimo de sequía que establece el plan hidrológico. Por otro lado, respecto a la escasez, se proponen acciones encaminadas a aumentar la oferta de agua donde sea posible.
