Zidane quiere seguir en el Real Madrid, lo ha dejado claro. Dirige un equipo que tiene una meta eterna: la Copa de Europa. Y el francés vive actualmente un problema, Houston, que a veces es bendito y otras maldito. Gane, empate o pierda, sus jugadores piensan en el PSG. Saben que ese partido marcará el devenir de muchos profesionales y de la temporada del club. Hoy, el campeón vigente venció por 1-3 en Leganés, pero los profesionales de Zidane jugaron sin darlo todo en el campo, sabedores de su superioridad técnica. El entrenador valoró el juego de sus hombres en Leganés a sabiendas de ese sexto sentido que hace que el futbolista sueñe con estar en el once de París: «Estoy muy contento y quiero elogiar a Asensio, Lucas y Kovacic. Lucas se sentía un poco mal antes del partido, pero pudo jugar, marcó el gol y se lo merece todo, por lo que lucha también. Mateo hizo un buen partido».
«Solo miro la clasificación para arriba, nunca miro para abajo»
Lucas, Casemiro y Ramos, de penalti, marcaron los goles madridistas. El capitán hizo la postura del arquero al celebrar su acierto. El técnico francés no habló de esos goles de hombres que no son los rematadores habituales, sino del fútbol en grupo del equipo y la relevancia de la victoria: «Ya somos terceros, es importante y yo solo miro la clasificación hacia arriba, nunca miro hacia abajo».
El Real Madrid encajó otro gol, pero marcó tres. Es la tónica del conjunto blanco en esta campaña: «Recibimos uno y marcamos tres. Son cosas del fútbol. El año pasado marcábamos muchos goles en los últimos minutos. Yo prefiero ganar 3-0 o 4-0 siempre, pero el fútbol es así».
Kovacic fue el director de juego, en sustitución de Modric. Estuvo bien el croata, aunque pierde balones y pases inesperadamente. El joven mediocampista, 23 años, generó una gran jugada que provocó el penalti transformado por el capitán en el 1-3. Por todo ello, Zidane ensalzaba su rendimiento: «Porque ha jugado poco y lo ha hecho bien».
El Real Madrid alcanzó la tercera plaza en la Liga y ganó 3-1 al PSG con este regreso al 4-4-2 que triunfó la pasada temporada: «Estamos bien y vamos para arriba».
