Agentes de la Policía Municipal de Madrid detuvieron durante la madrugada del jueves en el distrito madrileño de Usera a una mujer en estado ebrio que portaba un bebé de un año sin abrigo, empapado y con síntomas de hipotermia, ha informado un portavoz del Cuerpo a Europa Press.
Los hechos ocurrieron en las calles de Usera a plena noche y con los termómetros bajo cero. Dos agentes municipales se encontraban patrullando en la zona observaron a una mujer en estado ebrio con un bebé sin ningún tipo de roba de abrigo.
Los policías reclamaron a la mujer que protegiera del frío al niño, pero ésta se negó actuando de forma poco colaboradora y agresiva, a lo que los agentes respondieron quitándole el bebé de sus manos y metiéndolo dentro del coche patrulla porque intuían síntomas de hipotermia, que posteriormente fueron confirmados por el Samur.
La mujer, no obstante, les facilitó el teléfono del padre del bebé, con el que está en proceso de separación, para que se hiciera cargo del menor. El progenitor trasladó a los agentes que se planteaba interponer una denuncia por la situación de abandonos del bebé y de otra de sus hijas en común. Para ello, informó a los agentes de que la niña se encontraba en el domicilio de la madre.
Los policías se trasladaron hasta este inmueble, donde comprobaron que, efectivamente, la menor estaba durmiendo en su habitación con las ventanas abiertas. La niña explicó a los agentes que llevaba sola en casa desde que salió del colegio, y que únicamente había comido un sándwich. Ante este testimonio, fue trasladada a casa de su abuela para que ésta cuidara de ella.