La batalla por el mantenimiento de la planta de Gamesa en Miranda de Ebro continúa. El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, ofrece a los directivos de la compañía tres salidas para evitar que eche el cierre.
Así lo desveló la consejera de Agricultura y Ganadería y portavoz, Milagros Marcos, quien reconoció que la impresión tras la reunión del Ejecutivo autonómico con el responsables de Gamesa-Siemenes «no fue positiva», si bien, en la mañana de ayer, estaban a la espera de una respuesta de la compañía.
«Fue una reunión tensa, tanto en la forma como en el fondo», informó Marcos, en referencia a cómo se conoció la decisión del cese de actividad en la factoría, sin que antes hubiera información de la situación de la planta y por ello rechazó que 134 personas, el 65 por ciento de ellas mujeres, se puedan quedar sin empleo o tengan que trasladarse.
En este mismo sentido, la consejera de Economía y Hacienda, Pilar del Olmo, se puso en contacto por escrito con el directivo de la empresa, Ricardo Chocarro, a quien le propuso tres alternativas posibles para evitar la clausura de la planta.
Por un lado, le ofreció el mantenimiento de la actividad industrial histórica de la planta (palas de molinos de viento) en base a la fabricación productos de otras dimensiones que el mercado sí puede aceptar. Además, le propuso la reestructuración de la factoría en otra nueva actividad industrial en las instalaciones que ocupa en Miranda como en nuevos terrenos que la Junta pone a su disposición en este municipio burgalés.
Por último, de no considerar ninguna de las anteriores alternativas, invitan a la corporación a explorar la posibilidad de vender la planta a un grupo empresarial que desee operar.
La alcaldesa de Miranda, Aitana Hernando, por su parte, pidió a Siemens-Gamesa que reconsidere su decisión y anunció que «se hará oír a nivel nacional» para evitarlo.
La pelea por mantener el empleo de la factoría concluyó, por el momento, con la respuesta de Ricardo Chocarro al Gobierno presidido por Juan Vicente Herrera, donde justificó su decisión en que «no había otra opción», tras 19 años de funcionamiento.
Chocarro, en un encuentro con los medios de comunicación, explicó que la planta de Miranda «no es viable» porque, a pesar de las importantes inversiones realizadas para su adaptación y ampliación, solo puede fabricar turbinas para aerogeneradores de hasta 40 metros, cuando actualmente deben alcanzar 60.
Así se lo trasladó Chocarro a Herrera y Del Olmo, así como a Hernando y recordó que ofrece «la recolocación en otras plantas de la compañía en España a los 134 trabajadores afectados por el cierre de esta factoría», lo que busca evitar la Junta.
