Castilla y León es la Comunidad que más autónomos pierde. Entre noviembre de este año y el mismo mes de 2016, la Región vio desaparecer un total de 2.571 trabajadores por cuenta propia.
Estos datos chocan de frente con los de Madrid, que en ese mismo periodo ganó 8.700, el 65 por ciento de España.
El presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, arremetió contra el «fracaso» de las políticas activas de empleo de la Junta para potenciar el emprendimiento y remarcó que si complementara la tarifa plana hasta los 24 meses, «se daría la vuelta a la pérdida de autónomos» y fortalecería que aflorara la economía sumergida.
La presidenta de la organización en Castilla y León, Soraya Mayo, lamentó que el número de trabajadores por cuenta propia, 197.780, está por debajo de los que había en 2004. «Perdemos autónomos a pasos agigantados», dijo, para tachar las cifras de «malísimas y muy preocupantes».
En este contexto, Mayo exigió poder participar en el diseño de las políticas activas del plan de empleo que se debate en el Diálogo Social, a la vez que recalcó la necesidad de poner en marcha una tarifa plana por parte de la Junta para todos los autónomos que reemprendan, similar a la nacional, que será de 12 meses el año que viene.
Mayo también demandó, para incentivar el emprendimiento, igualdad de trato para la mujer que quiere ser autónoma que el que reciben las inscritas en el régimen agrario y propuso desgravaciones en IRPF de facturas, aumentar las inspecciones y más campañas de sensibilización para acabar con la economía sumergida.
