Es una cuestión de inercia. La mayoría de compañías españolas tiene la costumbre de salir a emitir deuda fuera de España, habitualmente en las plazas de Dublín, Frankfurt o Luxemburgo. Con la intención de romper con esta dinámica, que no solo es propia de España, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha mantenido reuniones con emisores, intermediarios y asesores con el fin de identificar problemas que puedan solucionarse para que haya interés en volver a probar a emitir en España.