Una de las gimnastas más grandes de la historia estadounidense, Aly Raisman, afirma que fue una de las víctimas de abuso sexual del médico del equipo nacional Larry Nassar, en una entrevista con CBS.
Raisman, de 23 años, ganó seis medallas, entre ellas tres de oro, en los Juegos Olímpicos de Londres (2012) y Rio (2016).
Con esta confesión se convierte en la última gimnasta, y la más famosa hasta el momento, en acusar al doctor Nassar de tocamientos de carácter sexual con la excusa de tratar lesiones en la espalda o en las caderas.
El escándalo, que estalló a finales de 2016, ha sacudido la disciplina y desembocado en la renuncia del presidente de la federación estadounidense, Steve Penny.
Larry Nassar está acusado de múltiples abusos sexuales contra gimnastas durante casi 20 años.
Médico del equipo estadounidense de 1996 a 2015, es decir durante cuatro Juegos Olímpicos, fue inculpado en febrero de 22 acusaciones de agresiones sexuales, incluidas niñas menores de 13 años. Actualmente se encuentra detenido.
Otra exgimnasta olímpica, McKayla Maroney, dijo en octubre que fue una de las víctimas del médico, una revelación que hizo en medio del escándalo por el caso Weinstein.
En el programa dominical "60 Minutes", del que se difundieron algunos extractos este viernes, Aly Raisman cuenta que recibió el primer "tratamiento" del doctor Nassar a los 15 años. Y dice que habló con el FBI después de los Juegos de Rio.
La exgimnasta hace también un llamado a USA Gymnastics, la federación estadounidense, a hacer cambios importantes en su "cultura".
La exatleta, que dice estar "realmente enfadada", solo quiere "impulsar cambios" para que las jóvenes gimnastas "no tengan que vivir esto jamás".
En cuanto al silencio que ha rodeado durante mucho tiempo las acciones de Nassar, ella pregunta: "¿Por qué no nos interesamos en lo que hizo la federación, en lo que hizo Larry Nassar: manipular tanto a estas chicas que tenían miedo de hablar?".
En diciembre de 2016, el diario Indianapolis Star reveló que 368 niños y adolescentes miembros de clubes afiliados a la federación de gimnasia habían sido víctimas de abusos sexuales en los últimos 20 años.