Más allá de la derrota de su equipo a manos del Real Madrid (3-0) , algunos aficionados del RCD Mallorca vivieron un mal rato en la noche del jueves durante la disputa de la segunda semifinal de la Supercopa de España de fútbol en el 'King Abdullah Sports City' de Yeda, Arabia Saudí. Según sus testimonios tras el encuentro, fueron increpados y acosados por una grada repleta de hinchas locales que en su mayoría apoyaban al conjunto blanco. Uno de estos mallorquinistas afectados pasó por los micrófonos de ' El Partidazo de COPE ' para denunciar que nadie se preocupó por su seguridad durante el encuentro pese a estar rodeados de seguidores del Real Madrid y que «la Federación se lo tiene que hacer mirar», en una clara crítica hacia el ente federativo, organizador de un torneo que no ha dejado de generar debate desde la elección de Arabia Saudí como sede . El propio aficionado del Mallorca aseguró que lo peor llegó al terminar el partido. «Nosotros nos hemos tenido que quedar hasta unos minutos más tarde porque teníamos que irnos todos juntos al autobús. En ese trayecto de la grada al autobús, de unos 15 o 20 minutos, todo el rato increpando, nos hacían pasillos centenares de personas haciéndonos fotos sin consentimiento, pegándonos incluso collejas, burlándose de nosotros, haciéndonos el 3-0 con los dedos... O sea, muy, muy desagradable». Sin embargo la peor parte la sufrieron las mujeres presentes en el grupo de aficionados españoles, pues en el citado trayecto de salida desde el estadio en Yeda hasta los autobuses fueron objeto de «tocamientos y fotos sin consentimiento... es muy grave». Una situación que ratificó Cristina Palavra, mujer del futbolista del Mallorca Dani Rodríguez , que compartió los desagradables momentos de los que tampoco se libraron los familiares de los jugadores del conjunto balear durante la semifinal de la Supercopa en Yeda. «Los chicos han jugado súper bien, la verdad es que han tenido garra, lo han dado todo y estamos contentos por ellos, pero bueno, la salida la verdad es que ha sido un poco complicada, íbamos con los niños, hemos estado sin seguridad...», relató ante un micrófono de IB3 . «Los chicos de aquí, de este país, se han puesto a hacernos fotos de cerca, nos han estado acosando , a la mujer de Dominik (Greif) también, yo con la niña que estaba dormida... La verdad es que nos hemos visto un poco desubicados porque no teníamos a nadie protegiéndonos y la salida ha estado muy mal», explicó. «Hemos ido juntos, en grupo, con la organización y todo, pero no se ha podido hacer nada más. Ir en grupo, llegar hasta el bus, entrar y ya está... pero bueno, es lo que hay», añadió la mujer del futbolista. No fue la única preocupación de la entrevistada, que confesó que no había conseguido hablar con su pareja tras partido: «No he podido hablar con él todavía. Le he mandado un mensaje pero está sin cobertura, y bueno, quiero saber también lo que ha pasado porque la que se ha liado ahí abajo ha sido tremenda y no sabemos nada de los chicos todavía. Pero bueno, imagino que están bien porque las malas noticias vuelan».