La Universidad Católica de Ávila (UCAV) ya es propietaria del edificio de Centros Universitarios, el antiguo Colegio de Huérfanos Ferroviarios, que se ubica en la calle de los Canteros de la capital abulense. Después de meses de negociaciones en el ámbito de un proceso de enajenación definido como «transparente y público», la millonaria operación se ha cerrado este jueves con la firma ante notario de la escritura de compraventa por parte del presidente de la Diputación, Carlos García, y la directora general del Instituto Secular Cruzadas de Santa María, Lydia Jiménez, por un importe de 15,7 millones de euros. Este paso, que se enmarca en el convenio vigente existente entre las dos partes y que unía el edificio a la UCAV hasta el año 2047, supondrá «la consolidación de la Universidad Católica de Ávila», según destacó la propia Lydia Jiménez y también su rectora, María del Rosario Sáez Yuguero. Por su parte, el presidente de la Diputación ha hablado de una «compraventa buena» para la sociedad abulense y al garantizar un proyecto educativo, docente y universitario de cara al futuro en la provincia de la mano de «una universidad privada que ha creído, apostado, formado y creado empleo en nuestra capital y provincia». A su vez, ha recalcado el «compromiso» de la institución provincial con la educación y ha destacado que «ese dinero va a redundar de una manera directa en la garantía de servicios de calidad en los municipios» y en proyectos como un «plan extraordinario de inversiones para los municipios, las negociaciones para la adquisición del Palacio de Almarza y aquellas infraestructuras necesarias para vertebrar el territorio», entre otras iniciativas de interés provincial, recoge Ical. Sobre el proceso, ha comentado que ha sido llevado a cabo con «transparencia» y «conforme a la legalidad», al registrarse una única oferta por 15,72 millones, además de con el compromiso de los grupos políticos. No en vano en el Pleno no se ha registrado ningún voto en contra en la adjudicación y en el periodo de exposición pública no se ha recibido ninguna alegación. El plan es que la UNED -hoy en el edificio de la UCAV- pueda iniciar el próximo curso lectivo en el Palacio de Nebreda, aunque antes habrá que realizar unas obras que se esperan licitar próximamente. Mientras tanto, Lydia Jiménez ha hablado de «un acto trascendente para Ávila» y, en lo personal, de un «momento de emoción y compromiso fuerte» que ha dicho asumir porque «es mi tierra y si algo me motiva y me impulsa a arriesgar es hacerlo en mi tierra y con una causa tan noble como es la educación de los jóvenes». Así, no ha dudado en declarar que con este paso «esta Universidad, que aparentemente es todavía pequeña, se consolida». La rectora de la UCAV ha subrayado que «este día va a ser histórico» para una Universidad, que empezó a proyectarse hace casi 30 años para que los jóvenes tuvieran la oportunidad de formarse y para hacer de Ávila una ciudad universitaria. Además, ha recordado que la institución de las Cruzadas de Santa María -«el motor de todo», ha subrayado- se hizo cargo de la Universidad hace 18 años, un periodo en el que se ha invertido mucho hasta llegar al día de hoy en el que «culmina un largo de trabajo para la compra del edificio y de la finca de Canteros». También ha agradecido el hecho de que el proceso haya contado «con el beneplácito de los partidos políticos y con toda la sociedad abulense, que cada día valora y quiere más a la UCAV». Pero los proyectos de la UCAV no acaban aquí. A la espera de valorar posibles inversiones en el edificio recién comprado, la UCAV proyecta realizar un centro de salud mental para jóvenes en el edificio de La Calera, adquirido también recientemente por las Cruzadas de Santa María. En estas dependencias no se descarta habilitar una residencia universitaria, pero el proyecto estrella sería este centro ante el desafío tremendo que representa la salud mental, indicó Lydia Jiménez.
