Mexicana de Aviación solo opera con dos aviones tras su rompimiento con TAR. Ambas comparten tres características polémicas: fueron adquiridas por el expresidente Felipe Calderón, no se han terminado de pagar por el Gobierno y fueron parte de uno de los eventos violentos de los últimos años, denominado como ‘el culiacanazo’.
Fue el pasado domingo 5 de enero que Mexicana de Aviación dijo a sus clientes que desde el lunes 6 de enero dejaría de operar en ocho destinos, y el mismo lunes se informó que se terminó el convenio con TAR como su socio operador, lo que le restó dos aeronaves para su operación.
La presidenta Claudia Sheinbaum dijo que la situación ocurre por una revisión de contratos, a fin de que Mexicana de Aviación continúe creciendo en 2025; sin embargo, la pérdida de destinos y de aeronaves fue criticado por la oposición, y tanto el PRI como el PAN resaltaron que el rescate de la aerolínea y la designación al Ejército “fue una mala idea”.
Sin embargo, la mandataria insistió en que Mexicana de Aviación tiene “larga vida”, esto mientras la aerolínea cuenta con dos aeronaves para operar en cerca de 10 destinos a lo largo del país, y mientras espera al menos cinco unidades más este año, tras anunciar un convenio por la compra de 20 aviones con la empresa brasileña Embraer.
Antes de formar parte de la flota de Mexicana de Aviación a partir del 26 de diciembre de 2026, las dos aeronaves Boeing 737-800 fueron parte del Ejército, y formaron parte de los hechos violentos en el ‘culiacanazo’, pero, ¿en cuál de todos?
Hay al menos dos jornadas violentas en Sinaloa que se conocen como ‘culiacanazo’, la primera de ellas fue el 17 de octubre de 2019, con la detención y posterior liberación de Ovidio Guzmán, mejor conocido como ‘El Ratón’ y uno de los líderes de la facción de ‘Los Chapitos’ en el Cártel de Sinaloa.
Tras la ola de violencia desatada en Sinaloa por la detención de Ovidio Guzmán, el expresidente Andrés Manuel ordenó su liberación, en uno de los hechos más polémicos de su sexenio.
Sin embargo, la participación de las dos aeronaves que actualmente forman parte de Mexicana de Aviación fue en el segundo ‘culiacanazo’, que tuvo lugar el 5 de enero de 2023, con la segunda detención de Ovidio Guzmán.
‘El Ratón’ fue detenido la mañana de ese día, luego de una misión encubierta de las autoridades que tomó cerca de medio año. Sin embargo, horas después de su detención y mientras era trasladado a la Ciudad de México, se desató una ola de violencia que paralizó ciudades de Sinaloa como Culiacán, Guasave, Guamuchil y Los Mochis.
Ante la situación de violencia que duró buena parte de ese jueves, las autoridades pidieron a la población resguardarse.
Las dos aeronaves de Mexicana de Aviación, que en ese entonces eran parte del Ejército, sirvieron para traslados durante los operativos de seguridad en Sinaloa. No se tiene información sobre si alguna recibió afectaciones durante los enfrentamientos y hechos violentos de ese día.
Las funciones de los aviones de Mexicana de Aviación cuando eran del Ejército era la realización de operativos militares; sin embargo, su uso era para traslados. No se tiene conocimiento de que cuenten con herramientas para enfrentamientos.
La historia de su adquisición se remonta al sexenio de Felipe Calderón, quien comenzó la compra de estas dos aeronaves con el objetivo de reforzar las acciones del Plan DN-III-E, que se aplica en casos de desastres y emergencias.
Información obtenida por El Financiero indica que los aviones se dejarán de pagar hasta 2031, casi 20 años después del fin del Gobierno de Calderón.
En 2015, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público autorizó a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) la celebración de un contrato para quedarse con las aeronaves, y desde ese entonces hasta 2023 formaron parte del Ejército, para integrarse a Mexicana de Aviación y dar vuelos comerciales desde diciembre de 2023.
Ahora, son las que mantienen en operación a Mexicana de Aviación, que debe operar cerca de 10 rutas con ellas en lo que llegan las nuevas aeronaves Embraer.
Con información de Aldo Munguía.
