El invierno llegó con fuerza a gran parte de Estados Unidos, y ha dejado a su paso un escenario complicado para millones de personas. La combinación de nieve, hielo y fuertes ráfagas de viento ha paralizado ciudades enteras, lo que afecta el transporte, las actividades escolares y la vida cotidiana. Mientras tanto, las autoridades piden extrema precaución ante el riesgo de accidentes en las vías y caídas de árboles por el peso acumulado de la nieve.
Las regiones del centro, sur y noreste del país son las que enfrentan mayores complicaciones. Kansas, Missouri, Indiana y Kentucky han registrado acumulaciones históricas de nieve, ya que han alcanzado hasta 25 centímetros en algunas zonas. En Washington D.C., el paisaje amaneció cubierto por un grueso manto blanco, mientras que, en Kentucky, ciudades como Louisville rompieron récords de acumulación con casi 20 centímetros.
La Guardia Nacional ha sido desplegada en varios estados para asistir a los automovilistas atrapados y garantizar la seguridad en las carreteras principales. Las autoridades locales han recomendado evitar desplazamientos innecesarios debido al riesgo que representan las vías resbaladizas y la baja visibilidad.
El transporte aéreo ha sido uno de los sectores más golpeados por esta tormenta invernal. Más de 1.300 vuelos fueron cancelados en un solo día, lo que ha afectado a miles de pasajeros en todo el país. Aerolíneas como Southwest, American Airlines y Delta han emitido alertas de viaje y flexibilizado sus políticas de cambio de vuelos.
En el ámbito educativo, cientos de escuelas en Indiana, Virginia y Kentucky suspendieron sus clases. Incluso el gobierno estatal de Maryland declaró el cierre de oficinas públicas como medida preventiva. El gobernador Wes Moore instó a la población a permanecer en casa y prepararse ante posibles cortes de electricidad.
El Servicio Meteorológico Nacional (SWN) ha advertido que esta podría ser una de las tormentas más intensas de la última década en algunas regiones. Las temperaturas seguirán descendiendo, con mínimas que podrían ubicarse hasta 25 grados por debajo de lo habitual.
Meteorólogos prevén que el fenómeno se desplace hacia el valle de Ohio y la costa este, extendiendo su impacto a nuevas áreas. En estados como Florida, aunque no se espera nieve, sí se anticipan temperaturas extremadamente bajas.
Por su parte, Amtrak ha cancelado decenas de servicios ferroviarios debido a las condiciones peligrosas en las vías. Las autoridades reiteran la importancia de seguir las recomendaciones oficiales y evitar cualquier viaje innecesario.
