Lavarse los dientes varias veces al día es clave para mantener una buena salud bucodental. Este hábito no solo previene la aparición de caries, sino que también combate el mal aliento y evita enfermedades como la gingivitis. Aunque es una tarea simple, muchas personas cometen errores comunes que pueden afectar la efectividad del cepillado. Desde la cantidad de pasta utilizada hasta el orden de los pasos, algunos detalles suelen pasarse por alto. Sobre este tema ha hablado la cuenta de TikTok de Mesena Dental , una clínica ubicada en el barrio de Ciudad Lineal, Madrid. Este perfil, dedicado a promover hábitos saludables, advierte en un un vídeo reciente sobre el gran error que puede comprometer nuestra salud dental. «Cogemos el cepillo de dientes, le vamos a echar un poquito de pasta, ¿vale? un granito. Y ahora, lo siguiente, no se moja, nos tenemos que hacer la limpieza en seco«, afirma el experto en el vídeo, advirtiendo sobre que no debe mojarse previamente el cepillo. El motivo detrás de esta recomendación es sencillo: las pastas de dientes están diseñadas para optimizar la limpieza mediante sus componentes abrasivos, humectantes y, sobre todo, el flúor. Este último ingrediente, fundamental para remineralizar el esmalte dental, pierde eficacia si la pasta se diluye con agua antes de usarla. En el mismo vídeo, los especialistas insisten en la importancia de preservar las propiedades del flúor durante el cepillado. «El flúor nos va a ayudar para remineralizar el esmalte. Si nosotros mojamos la pasta de dientes, le vamos a eliminar parte de esas propiedades que tienen, entonces lo ideal es cepillarse en seco», concluyen.
