El CD Barbastro vivirá este sábado, a las 19:00 horas, un partido que quedará marcado para siempre en la historia de su club: la visita del FC Barcelona al estadio Municipal de la localidad en el marco de la Copa del Rey. Para este esperado encuentro, el club ha lanzado una última remesa de 50 entradas para el público general, las cuales se agotaron en pocas horas, cumpliendo así la previsión de colgar el cartel de "no hay billetes". Con esta venta, el Barbastro alcanzará su capacidad máxima de 5.750 personas, un aforo que se repetirá por segundo año consecutivo.
El éxito de la venta de entradas ha sido rotundo. Desde el inicio de la campaña, la expectación ha sido enorme, sobre todo entre los socios, quienes pudieron adquirir sus localidades antes de que se pusieran a la venta al público en general. Las largas filas en la sede del club y la acreditación de más de un centenar de periodistas –algunos de ellos provenientes de países tan lejanos como Polonia– dan cuenta del interés que genera la presencia de uno de los clubes más grandes del mundo, el FC Barcelona.
La llegada del FC Barcelona a Barbastro no solo implica una fiesta del fútbol, sino también una planificación meticulosa en términos de seguridad. El club ha coordinado un plan de seguridad con la colaboración de la Policía Local, Protección Civil y la Guardia Civil, además de contar con apoyos de unidades especializadas como la Agrupación de Reserva y Seguridad (ARS), el Equipo anti-dron, la USECIC de la Comandancia de Teruel, y el Grupo de Desactivación de Explosivos (GEDEX). Todo ello para garantizar que el evento se desarrolle con total normalidad y seguridad, tanto para los aficionados como para los jugadores.
Para los futbolistas del Barbastro, enfrentar al Barcelona es un sueño hecho realidad. Así lo reconoce Dani Santigosa, uno de los referentes del equipo: "Es un orgullo jugar contra el mejor equipo del mundo. Las ganas son increíbles, y ojalá podamos hacer un buen papel y que la gente disfrute del encuentro". Santigosa, quien compagina su pasión por el fútbol con su labor como nutricionista, también ha resaltado la importancia de estos partidos para el equipo y la motivación que les da el apoyo de su afición.
"Para nosotros, ganar este partido sería el mayor regalo que el fútbol nos podría hacer. Somos jugadores de Segunda RFEF, y aunque tratamos de vivir como profesionales, nunca llegaremos al nivel del Barça. Ganarles sería algo increíble", añadió el jugador, con la ilusión de que su equipo logre dar la campanada y hacer historia.
La hinchada de Barbastro tiene un papel fundamental en este tipo de partidos. "La afición en estos partidos es increíble. Nos hacen sentir especiales", señaló Santigosa, al tiempo que subrayó que el equipo necesita el apoyo de los seguidores, sobre todo en la liga, donde atraviesan un momento complicado. "Cuanta más gente venga al campo, más fácil será que saquemos nuestra mejor versión en la segunda vuelta", añadió.
El presidente del Barbastro, Rafael Torres, expresó su orgullo por poder competir contra un equipo de la talla del Barcelona. "Es un honor volver a tener la suerte de competir contra uno de los mejores equipos del mundo. Es una oportunidad para disfrutar del fútbol y darle visibilidad a nuestro club, que está formado por un equipo de jugadores y colaboradores muy comprometidos", comentó.
Con un presupuesto modesto de alrededor de 500.000 euros, el Barbastro es uno de los clubes más humildes de la Segunda RFEF. A pesar de las limitaciones económicas, su esfuerzo por mantener un estilo de juego competitivo y su trabajo en la cantera han permitido al equipo llegar a este tipo de eliminatorias. "Nuestro presupuesto es de los más bajos, pero esta eliminatoria nos dará un respiro económico para lo que resta de temporada. Aunque no debemos olvidar que organizar un evento de esta magnitud implica gastos significativos", señaló Torres.
La asistencia de más de 5.500 personas a un estadio cuyo promedio de asistencia no supera las 700 personas es todo un reto para el Barbastro, tanto a nivel logístico como organizativo. Sin embargo, tanto la junta directiva como los colaboradores están preparados para afrontar este desafío, siempre con la mirada puesta en hacer historia.
El Barbastro ya ha logrado una hazaña al clasificar dos años consecutivos para esta ronda de la Copa del Rey, y ahora, frente al Barcelona, el equipo tiene una nueva oportunidad de hacer historia. Más allá del resultado, el sueño sigue siendo el mismo: disfrutar del fútbol, competir al máximo nivel y seguir luchando por el futuro del club.
Este sábado, Barbastro vivirá una fiesta del fútbol en la que, pase lo que pase, el equipo y su afición serán los verdaderos protagonistas.
