La noche de Reyes es uno de los momentos del año más esperados para los más pequeños de la casa, y la ilusión por los regalos se ve acompañada también en ocasiones de ciertas dosis de ansiedad y preocupación ante la incertidumbre de si Sus Majestades finalmente habrán acertado o cumplido con sus deseos.
Ante esta circunstancia, el Servicio de Pediatría del Hospital Quirónsalud Infanta Luisa Sevilla recomienda que, como es tradicional, los miembros de la familia se pongan de acuerdo con los regalos para los niños, y limitar su número a uno o dos por cada uno de los allegados para evitar el denominado síndrome del “niño hiperregalado”.
"Cada familia debe adecuar su estructura a las necesidades de cada niño, que se sienta feliz por la calidad de lo que recibe y no por la cantidad", indica el doctor Rafael Espino, jefe del Servicio de Pediatría del citado centro hospitalario, informa Ep.
En este sentido, la psicóloga Carla Álvarez, de Blua Sanitas, ofrece una serie de consejos para controlar la ansiedad de cara a la entrega de regalos, que de forma genérica se resumen en establecer expectativas realistas. Además, es necesario hablar con los niños sobre la idea de que los regalos son una parte pequeña de la celebración y que el verdadero significado está en compartir momentos especiales en familia, algo que puede ayudar a reducir la presión. "Los más pequeños, que aún están desarrollando su capacidad para gestionar emociones complejas, pueden experimentar esta anticipación como una forma de ansiedad y frustración, ya que no cuentan con las herramientas emocionales para regularla. Es fundamental entender que, para ellos, la espera se convierte en un reto emocional importante", ha explicado Álvarez.
El exceso de regalos puede generar un sentido de descontrol, ya que los niños pierden la capacidad de valorar el esfuerzo detrás de cada regalo. Esto suele suscitar "una dependencia emocional de lo material y una falta de apreciación por los valores intangibles como el esfuerzo, la gratitud o la importancia de compartir, generando efectos negativos a largo plazo en su desarrollo emocional y psicológico", añade la psicóloga.
Qué pedir en la carta
Respecto a qué regalar, los especialistas recomiendan el fomento de la lectura, ya que "se está produciendo un resurgimiento de los libros infantiles con formatos adecuados a los nuevos avances editoriales que deben cubrir los espacios libres desde las primeras edades".
Por su parte, el pediatra Andrés Osuna apunta también a la adecuación del juguete según la edad y la seguridad. "Debe tener las garantías de la agencia estatal acreditada, en la Unión Europea (UE) debe contener el distintivo de CE, lo cual garantiza que ha sido evaluado, es seguro para el niño y contiene las instrucciones para su uso en castellano". En líneas generales, el especialista asegura que los juguetes no tienen por qué ser sofisticados o complicados, "mientras menos hace el juguete, más hace el niño". De ahí que aconseja siempre incluir juguetes que favorezcan la imaginación, bien sea con figuras -muñecas, animales, superhéroes- u objetos comunes -coches, aviones, trenes, cocinas-,
Los pediatras aconsejan también aquellos que desarrollan la motricidad gruesa -bicicletas, patinetes, bloques, moldes- o la motricidad fina, como juegos de encajar. Para niños grandes y adolescentes, es fundamental incluir juguetes que favorezcan su desarrollo personal e intelectual, como el arte, música, lectura o juegos que puedan compartirse en familia, como los juegos de mesa.
Los más vendidos
Estas navidades los laboratorios de bolígrafos, las cafeteras de imitación o las muñecas de Monster High son algunos de los juguetes más demandados, según indica el comparador de precios Idealo, que destaca que los juguetes más tradicionales se imponen este año a las pantallas.
El regalo estrella proviene este año del mundo de la creatividad: los talleres de bolígrafos. Se trata de sets de diseño que permiten a los más pequeños personalizar sus propios bolígrafos como quieran, dando rienda suelta a su imaginación. Otro de los juguetes que más interés ha levantado es la taquilla de juguete donde los niños pueden guardar sus objetos más preciados. Entre los más buscados también se encuentran los juguetes de imitación, como las cafeteras.
Por otro lado, en el top 10 también se encuentran otros más clásicos, que han estado presentes en la infancia de los padres, pero con un punto más innovador. Uno de ellos son los tradicionales scalextric, cuyos homólogos de hoy en día son las carreras de juguete de marcas como Hot Wheels. Tampoco las muñecas han pasado de moda y se han ido adaptando a los gustos de los más pequeños. Si el año pasado hubo un 'boom' tras la película de Barbie, estas Navidades las muñecas de Monster High que imitan a Miércoles de la familia Addams son las que más interés generan.
En este sentido, el responsable de comunicación de Idealo, Kike Aganzo, ha afirmado que "aunque suelen ser los más demandados, la tecnología y las pantallas no son lo único que piden los niños y niñas por Navidad". "Los juegos tradicionales siguen convenciendo a los pequeños de la casa y son un regalo perfecto para jugar en familia y para no pasar lo que les queda de vacaciones o en su tiempo libre pegados a una pantalla", ha destacado.
