En un discurso plagado de referencias a José Antonio de Aguirre ha introducido pocas referencias políticas aunque sí un deseo de "avanzar" en el autogobierno en 2025 con la mirada puesta en la Seguridad Social
Anuario 2024 - Imanol Pradales se convierte en lehendakari... y todas las noticias del año
Imanol Pradales ha pronunciado este 31 de diciembre su primer mensaje televisado de Nochevieja como lehendakari tras haber accedido al cargo hace seis meses, en junio de 2024. Pradales lo ha realizado desde el palacio de Ajuria Enea, con corbata y delante de una ikuriña y de un árbol de Navidad. El pesebre estaba fuera de plano, en otra estancia. Ha admitido de entrada que no iba a ser “original” en su estreno y también ha asumido que quienes quería que fuesen sus principales destinatarios, los jóvenes, son precisamente los menos atentos a este tipo de intervenciones institucionales. A ellos les ha pedido “paciencia, esperanza y confianza” y también que no se dejen “embaucar” por “mensajes populistas”.
Pradales ha grabado su discurso de siete minutos en cada idioma oficial en una sala del palacio de Ajuria Enea que, en sus meses en el cargo, ha celebrado numerosas reuniones y comparecencias. Por allí han pasado desde Pedro Sánchez hasta el presidente de Canarias, Fernando Clavijo. En él ha querido instalar el escritorio que fue del lehendakari José Antonio de Aguirre en las oficinas del exilio, en París, recientemente devueltas al PNV y en las que también había un valiosísimo reloj rescatado hace pocas fechas. También ha seguido la estela de Iñigo Urkullu de llamar a su alocución “mensaje de Gabon”, como hacía Aguirre, que fue el primero en el cargo y que accedió a él en plena Guerra Civil. En esa misma sala cuelga también un Zuloaga ('Doña Virtudes de azul y de amarilla') y en ella se guarda la ikurriña con la que un batallón de 'gudaris' entró en París durante la liberación tras la ocupación nazi.
La intervención, iniciada con un recuerdo al lehendakari José Antonio Ardanza, el más longevo en democracia y fallecido en abril de este año, a quienes tienen que trabajar durante las jornadas festivas y a las personas vulnerables, ha estado muy centrada en los jóvenes. “En este primer mensaje de Gabon, quiero hablaros a los que probablemente no estaréis escuchando este mensaje: a las y los jóvenes. Estos días seguro que os dirán cosas como: 'nosotras y nosotros a vuestra edad hacíamos esto o aquello'. O 'si tuviéramos vuestra edad no estaríamos perdiendo el tiempo en cuestiones que no tienen importancia'. Estaréis cansados de escucharlo. Y no me extraña. Vivid la juventud a vuestra manera. Vivid cada experiencia a vuestra manera. Al fin y al cabo, eso es, exactamente, lo que hicimos nosotros a vuestra edad”, ha arrancado.
Volviendo a citar a Aguirre, ha dirigido también un aviso a la juventud. “Vuestra libertad no debe estar reñida con vuestra responsabilidad”, ha indicado. Según Pradales, la nueva generación tiene su futuro “en juego” por los riesgos del “creciente antieuropeísmo”, la “demagogia” y el “extremismo”. “En estos tiempos [...] crecen las olas de la intransigencia y autoritarismo, golpeando los muros de contención construidos a lo largo de décadas. La libertad, la democracia, el porvenir no están asegurados. Y, tal y como nos enseñaron las personas más mayores de casa, cualquier alternativa es peor. Mucho peor”, ha manifestado.
Y ha continuado: “Sé que algunas personas tenéis dificultades. Dificultades para encontrar un buen trabajo o para independizaros. Sé que algunas y algunos veis con preocupación y pesimismo el futuro. Lo comprendo. Pero no compréis relatos manipulados ni soluciones mágicas. No os dejéis embaucar por mensajes populistas que no dicen la verdad. Los problemas complejos, que los tenemos, no se solucionan con respuestas simples. Tampoco de la noche a la mañana. Por eso os pido que tengáis paciencia, esperanza y confianza en Euskadi. También en vosotros mismos”.
La Presidencia vasca ha querido destacar como gran idea-fuerza del mensaje una frase que Pradales lleva meses repitiendo desde accedió al cargo, la de que los problemas “complejos” no se solucionan con respuestas “simples”. Se da la circunstancia de que el PNV, en sus ponencias políticas de cara al inminente proceso congresual que afrontará en la primera parte de 2025, ha planteado justo lo contrario para mejorar su penetración en la sociedad.
Pradales lidera un Ejecutivo de coalición entre PNV y PSE-EE con mayoría absoluta. No ha habido ninguna referencia ni a los socios ni a la oposición. En estos meses ha aprobado ya sus primeros presupuestos y puesto en marcha algunas leyes y otras medidas, como el intento de lograr un pacto de país para mejorar la Sanidad pública. Sin menciones específicas, ha prometido dar “todo lo mejor” para cumplir con los compromisos adquiridos. Se ha detenido más en describir una “Euskadi feliz”, “donde la gente pueda disfrutar y sonreír”.
El lehendakari apenas ha realizado propuestas políticas, aunque sí ha subrayado la necesidad de “avanzar” en autogobierno. Pradales tiene dos frentes abiertos. Por un lado, se trabaja en completar el Estatuto de 1979. Los Gobiernos central y vasco han fijado 2025 como horizonte para terminar el proceso de transferencias, incluida la gestión económica de la Seguridad Social y otras políticas asociadas como la Inspección de Trabajo o las prestaciones de paro. Se persigue gestionar 12.000 millones de pensiones. Es algo que nunca se ha hecho con ninguna comunidad autónoma. En el horizonte más próximo se esperan otros acuerdos sobre Salvamento Marítimo o Meterología. Fruto de acuerdos previos del Gobierno de Urkullu, este mismo 1 de enero se sustanciarán nuevos traspasos como la gestión de Cercanías o parte de las políticas migratorias de acogida.
“Creemos en el pasado y creemos también en el futuro. En un reparto equitativo y equilibrado entre las personas mayores y jóvenes. Creemos en una Euskadi que trabaja y se esfuerza cada día. Una Euskadi que avanza en su autogobierno, consciente de que es la clave de nuestro bienestar. Un autogobierno que nos dote de mayores capacidades políticas para tomar en nuestro País las decisiones que nos afectan de manera directa, mejorando así nuestra calidad de vida. Una Euskadi madura que, con sus aciertos y errores, toma las riendas de su futuro. Una Euskadi en una Europa que avanza en un contexto internacional complicado, de incertidumbre, sí, pero con oportunidades que debemos aprovechar”, ha planteado Pradales casi al término de su discurso, que ha cerrado con un “zorionak eta urte berri on”.
