A medida que aumenta el consumo de los nuevos productos derivados para el tabaco lo hace también la normativa para regularlos. Bélgica ha puesto así en el punto de mira los váper de un solo uso, pues a partir del 1 de enero estará prohibida en todo el país su venta, tal como informa AFP. Con esta medida, Bélgica se convierte en el primer país de la Unión Europea en prohibir los váper de un solo uso, consciente del atractivo que estos productos generan en los más jóvenes , con reclamos como los sabores. España, por su parte, ya ha iniciado también los trámites para vetar los sabores en los cigarrillos electrónicos y el Ministerio de Sanidad quiere también acabar con los váper de un solo uso pues el daño que provocan estos productos, considera el departamento de Mónica García, es doble: a la salud y al medio ambiente. La prohibición de los váper desechables forma parte del plan antitabaco que quiere llevar a cabo Bélgica, enmarcado también en los objetivos europeos. Las nuevas normas también prohibirán fumar en más espacios públicos, como instalaciones deportivas, zoológicos y parques infantiles, así como cerca de colegios y hospitales. El propósito de la UE es lograr una generación libre de humo para 2040, reduciendo los fumadores de los países del 25 por ciento actual a menos del 5 por ciento. «El problema es que los jóvenes empiezan a usar los váper sin saber siempre su contenido en nicotina, y la nicotina es adictiva», afirma a AFP Nora Melard, portavoz de la Alianza para una Sociedad sin Tabaco de Bélgica. «Tenemos jóvenes que dicen que se despiertan por la noche para dar una calada. Es muy preocupante», sentencia. Ya en 2021 el gobierno belga presentó una propuesta a la Comisión Europea para prohibir estos dispositivos de un solo uso. El pasado marzo recibió la luz verde que necesitaba para dar cualquier paso en esta dirección. Según un estudio realizado por la UE en 2023, la mayoría de los consumidores de cigarrillos electrónicos optan por váper recargables, pero las de un solo uso son especialmente populares entre los jóvenes de 15 a 24 años. Su precio, además, suele estar por debajo del de un paquete de tabaco. Al solicitar la aprobación de la UE para su prohibición, Bélgica argumentó que los vapeadores de plástico de un solo uso con batería de litio suelen tirarse a la basura a los cinco días de su compra.
