El vuelo 7C2216 de Jeju Air, un Boeing 737-800 que cubría la ruta desde Bangkok, Tailandia, hasta el Aeropuerto Internacional de Muan en Corea del Sur, sufrió un trágico accidente durante su aterrizaje. El avión, con 181 personas a bordo (175 pasajeros y 6 tripulantes), intentó aterrizar sin que el tren de aterrizaje estuviera desplegado, lo que resultó en un aterrizaje de emergencia sobre el fuselaje.
La aeronave se salió de la pista, chocó contra una barrera y estalló en llamas, causando la muerte de 179 personas; solo dos miembros de la tripulación sobrevivieron con heridas graves.
Las investigaciones preliminares sugieren que el accidente pudo haber sido provocado por una combinación de factores, incluyendo un posible impacto con aves que afectó el funcionamiento del tren de aterrizaje y otros sistemas. Seis minutos antes del accidente, la torre de control del aeropuerto emitió una advertencia sobre la presencia de aves en la zona.
El trágico accidente del vuelo 7C2216 de Jeju Air dejó solo dos sobrevivientes: Lee Min-jun y Koo Hye-jin, ambos auxiliares de vuelo. El avión, un Boeing 737-800 que viajaba de Bangkok a Muan, intentó aterrizar sin tren de aterrizaje, lo que provocó un impacto directo. Lee y Koo estaban en la parte trasera de la aeronave al momento del siniestro, lo que posiblemente contribuyó a que lograran sobrevivir.
Lee Min-jun sufrió múltiples fracturas y está hospitalizado en estado crítico, mientras que Koo Hye-jin presenta lesiones en el tobillo y la cabeza, aunque su condición es estable. Ambos han sido considerados "milagrosos sobrevivientes" debido a la magnitud del desastre, el peor accidente de aviación civil en la historia de Corea del Sur.
Según reportó la agencia Yonhap, Lee fue rescatado de entre las llamas en la cola del avión y fue transferido al Hospital de la Universidad Femenina Ewha en Seúl. Allí, el director del centro médico, Ju Woong, informó que Lee no presenta indicios de pérdida de memoria ni problemas neurológicos aparentes, pero aún no se descarta el riesgo de secuelas graves, como una posible parálisis.
“Cuando me desperté, ya me habían rescatado”, comentó Lee a los médicos, mostrando signos de lucidez pese a la magnitud del trauma, informó el director del centro médico.
La supervivencia de Lee y Koo en el trágico accidente del vuelo 7C2216 de Jeju Air, que dejó 179 víctimas fatales, se atribuye a una combinación de factores que incluyen su ubicación en la parte trasera del avión y las rápidas labores de rescate.
Según reportes oficiales, ambos auxiliares de vuelo estaban en la cola de la aeronave al momento del impacto, una zona que sufrió menos daño estructural durante el aterrizaje forzoso y el posterior incendio. Este factor, junto con la pronta respuesta de los equipos de emergencia, fue clave para que fueran rescatados con vida.
