Hace 20 años, una bengala prendida desató una noche fuera de control y sin precedentes en la noche de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA).
Callejeros, una de las bandas de rock con mayor popularidad, realizó tres shows en República Cromañón (calle Bartolomé Mitre al 3000), uno de los boliches más conocidos para los porteños.
Justamente, en la noche del 30 de diciembre presentaron su último disco, aunque no se trató de una despedida cualquiera. Ese concierto quedó inmerso en una masacre, en donde murieron 194 personas y hubo 1.432 heridos.
La falta de seguridad e higiene fueron partícipes de una tragedia difícil de olvidar. A pocos minutos de comenzar el show, un fanático prendió una bengala -hecho común en los conciertos-, la cual generó que la media sombra (tela de plástico inflamable) se prendiera fuego en pocos segundos.
En el local bailable había más de 4.500 personas. Sin embargo, el espacio habilitaba únicamente a 1.031, ya que estaba catalogado como "clase c".
Si bien el fuego se extinguió, el humo se expandió por todo el boliche. Allí, los fanáticos se desesperaron por salir. Hubo desesperación y gritos. Algunos pudieron salir, pero otros quisieron volver para ayudar a sus seres queridos.
Así se encuentra el boliche "República Cromañón"
Los bomberos destrabaron uno de los accesos y los cuerpos de miles de personas se derrumbaron. En aquel entonces, el abandono fue indescriptible.
La tragedia dejó un saldo de 194 muertos, producto de la inhalación de monóxido de carbono y ácido de hidrógeno. Incluso, familiares y amigos estuvieron varios días en la búsqueda de sus conocidos. Una celebración de año nuevo que no fue.
Luego de la tragedia del 30 de diciembre de 2004, la Justicia llevó adelante una serie de investigaciones.
En 2008, Omar Chabán, encargado del boliche, llegó a juicio oral junto a otros 14 imputados. El empresario se desligó del hecho y acusó a uno de los fans por prender la bengala que desencadenó en el incendio.
Tras la declaración de Chabán, Julio Roberto Vittone -acusado- se transformó en el foco de la prensa y la Justicia le abrió una investigación paralela con su nombre. No obstante, no hubo avances al respecto y, por el momento, es una incógnita quién prendió la bengala en el concierto de Callejeros.
En octubre de 2012, la Sala IV de la Cámara de Casación Penal confirmó las condenas dictadas por la Sala III del mismo tribunal. Las penas, que fueron ratificadas y/o modificadas en septiembre de 2015, corresponden a:
