El directorio de UTE aprobó, de manera unánime, proponer un ajuste de tarifas del 3% al Poder Ejecutivo a partir del próximo 1º de enero de 2025. La propuesta aún está pendiente de aprobación por parte del Ejecutivo. La presidenta de la entidad, Silvia Emaldi, destacó en conferencia de prensa que la empresa anticipa «ganancias importantes» en 2024.
Emaldi explicó que el equipo económico de la empresa estatal había calculado inicialmente que el ajuste debería ser del 5%, basándose en las variables macroeconómicas proporcionadas por el Ministerio de Economía y las previsiones de gasto de UTE para el próximo año. Sin embargo, la decisión final del directorio fue ajustar la propuesta a un 3%.
El ajuste menor propuesto responde, según Emaldi, a los esfuerzos por mantener la eficiencia en los gastos y la recuperación de pérdidas de energía, lo cual permite una menor alza en las tarifas. Ella comentó: “Tomando en cuenta lo que hemos venido haciendo durante el período, considerando la eficiencia en gastos que la empresa ha venido teniendo en estos años y a su vez la recuperación de las pérdidas de energía, eso lo estamos volcando a un menor ajuste de tarifas”.
El año pasado, la propuesta de ajuste que se presentó al Ejecutivo fue del 3.5%. No obstante, la directora por el Frente Amplio de ese entonces, Fernanda Cardona, quien ahora es ministra de Industria del nuevo gobierno de Yamandú Orsi, se opuso a ese ajuste. Este cambio refleja una intención de la empresa de responder a las críticas y ajustar según el contexto actual.
La presidenta de UTE anticipa un año próspero en 2024, con ganancias de la compañía que probablemente superen significativamente las del año anterior. En 2023, UTE reportó un balance de aproximadamente 108 millones de dólares. Emaldi indicó que para el próximo año, las ganancias podrían alcanzar los 200 millones de dólares gracias a un «volumen importante de exportaciones, sobre todo a Argentina«.
Estos resultados financieros positivos son en parte el resultado de las estrategias de exportación que UTE ha implementado recientemente, lo que ha aumentado sus ingresos exteriores, mejorando así su posición económica.
El ajuste de tarifas es una respuesta a las condiciones económicas del país y a las proyecciones internas de UTE. La empresa ha estado observando de cerca el comportamiento de las variables macroeconómicas y buscando formas de optimizar sus operaciones para poder mantener las tarifas lo más bajas posibles sin comprometer su capacidad financiera.
El impacto potencial de la subida tarifaria también dependerá del enfoque del Poder Ejecutivo respecto a la propuesta, el cual deberá sopesar las necesidades operativas de UTE con el impacto en los usuarios finales.