Los aficionados al fútbol en el Reino Unido recibieron una noticia inesperada la semana pasada: Jeff Stelling y Chris Kamara se reunirán en un evento especial este Boxing Day. Sin embargo, esta celebración también marca el final de la era de Amazon como titular de los derechos de la Premier League, que concluirá con la transmisión de los partidos del 26 y 27 de diciembre.
La plataforma de streaming ha estado al frente de la cobertura de la Premier League durante seis años, pero su asociación con la liga llega a su fin. El partido entre el Arsenal e Ipswich Town será el último que retransmitan, ya que la próxima temporada traerá un nuevo ciclo televisivo nacional que no incluirá a Amazon. En su lugar, Sky Sports y TNT Sports se quedarán con la mayor parte de los derechos de transmisión, mostrando hasta 270 partidos en vivo.
El nuevo acuerdo de derechos de transmisión, que se extiende hasta 2029, tiene un valor impresionante de £6,700 millones. Este cambio ha llevado a Amazon a retirarse de la competencia, ya que las sumas involucradas eran demasiado grandes para la plataforma. Durante su tiempo en la Premier League, Amazon pagó £30 millones por la cobertura de dos partidos de 10 cada temporada, pero se estimó que mantener su lugar en la tabla para la temporada 2025-26 les habría costado diez veces más.
Con su salida de la Premier League, Amazon ahora centrará su atención en la Liga de Campeones, reduciendo su presencia en el mercado de derechos de transmisión en el Reino Unido, Alemania e Italia. La alianza que se esperaba entre Amazon y la Premier League para fomentar la competencia a largo plazo no se materializó como se había anticipado. En cambio, el regreso de Sky y TNT, con sus obligaciones financieras insuperables, parece ser el camino a seguir.
La asociación entre Amazon y la Premier League se confirmó en junio de 2018, cuando la plataforma de streaming se unió a la lucha por los derechos de transmisión. Sin embargo, el cierre patronal entre Sky y BT Sports, que ahora se conoce como TNT, se rompió hace cuatro meses, permitiendo que Amazon pujara con éxito por uno de los paquetes que no alcanzaron el precio de reserva en la subasta inicial.
