Cuatro de cada cinco jóvenes que poseen un título de educación superior tienen empleo en Castilla y León. En concreto, se trata del 79,8 por ciento de la población con carrera universitaria o estudios de FP superior entre 25 y 34 años, frente a la media española que supera a la de la Comunidad en casi tres puntos, al alcanzar el 82,7 por ciento. Así se desprende de los datos ofrecidos por el Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes en su anuario estadístico, consultado por Ical, y que establece una tasa aún mayor de empleo en el conjunto de la población activa, dado que el 82,3 por ciento de las personas entre 25 y 64 años con títulos de educación superior tiene trabajo. Un porcentaje que, en todo caso, sigue estando por debajo de la media nacional, del 83,7 por ciento con estos parámetros. La tasa se reduce, tanto a nivel nacional como autonómico, para aquellos que han completado el Bachillerato o la FP de Grado Medio, ya que apenas el 73 por ciento de los jóvenes entre 25 y 34 años tiene empleo en Castilla y León. No obstante, en este caso el porcentaje es mayor que en el conjunto de España, donde se sitúa en el 70,9 por ciento. Lo mismo sucede para la población joven que no ha completado los estudios postobligatorios de Secundaria, donde el 64,4 por ciento de ocupación en Castilla y León permanece por encima del 62,9 por ciento de la media nacional. Todo ello sitúa la tasa de empleo general en términos parecidos para Castilla y León y España, ya que la comunidad alcanza un 74,2 por ciento entre los jóvenes de entre 25 y 34 años y en el país se llega al 75 por ciento, aunque los términos se invierten para el conjunto de la población activa mayor de 25 años : 75,4 por ciento de empleo en Castilla y León por un 73,3 por ciento en el conjunto de España. En todo caso, y tal y como revela el Ministerio de Educación, el porcentaje de población con estudios superiores que está ocupada es un 7,3 por ciento mayor que la de hace una década, gracias al salto dado desde el 76,4 por ciento del año 2013, en plena recesión , hasta el 83,7 por ciento obtenido en 2023, que además se sitúa muy por encima del 46,1 por ciento de empleo que obtiene la población que solo tiene completada la Educación Primaria o inferior. La tasa de paro del conjunto de la población activa entre los 25 y los 64 años también refleja esta diferencia en el nivel de estudios, puesto que solo el 6,4 por ciento de las personas con estudios superiores en Castilla y León se encuentran desempleadas, frente al 8,3 por ciento de paro de los habitantes que completaron la Educación Secundaria postobligatoria y el 12,1 por ciento que ni siquiera llegaron a terminar estos estudios. Una progresión que también se da a nivel nacional desde e l 6,8 por ciento de desempleo entre los que tienen educación superior hasta el 16,5 por ciento de quienes no completaron la segunda etapa de Secundaria, informa Ical. En el desagregado estadístico por sexos, los hombres mantienen un porcentaje de empleo mayor que las mujeres en todos los niveles de estudios, pero esta desigualdad se reduce a medida que avanza el nivel de educación. Así, entre los titulados superiores, los hombres de Castilla y León cuentan con un 87 por ciento de ocupación frente al 78,6 por ciento de las mujeres, diferencia que se reduce ligeramente a nivel nacional, donde la media de empleo entre varones es también del 87 por ciento, mientras que la de las mujeres alcanza el 80,9 en la población de entre 25 y 64 años.