Desde un punto de vista preventivo, es más conveniente para cualquiera conocer que estas conductas se consideran como un delito que puede resultar en la pérdida de la libertad personal. Por otra parte, encarar un proceso penal tiene como consecuencia el enfrentarse al escarnio público, ya que, ante los ojos públicos y de la ley, quien comete el delito de seguridad vial se convierte en un delincuente, teniendo una alta posibilidad de afrontar años de cárcel, así como antecedentes penales, siendo así una forma de prevención de accidentes para los ciudadanos y así que cometan infracciones de ese grado. Delitos contra la seguridad vial Los delitos contra la seguridad vial más comunes que se dan a conocer son personas detrás del volante bajo los efectos del alcohol, conductores que se negaron a realizar pruebas de detección alcohólica, conducir sin licencia de conducir por retirada o por no haberla tenido nunca, estar al volante bajo los efectos de sustancias estupefacientes y la conducción de manera temeraria.