El Tribunal Penal de Alajuela sentenció a ocho años de prisión a un hombre de apellido Sánchez por la muerte de su tío y por amenazas agravadas mediante el uso de arma de fuego.
La víctima mortal fue Donald Antonio Sánchez Castillo, de 47 años, quien fue asesinado la madrugada del domingo 22 de octubre de 2023 en El Infiernillo, también conocido como barrio Santa Rita, en el distrito de San José, provincia de Alajuela.
Los jueces encontraron culpable a Sánchez en dos casos. El primero ocurrió en agosto de 2023, cuando llegó en motocicleta y amenazó de muerte a su tío. Esa vez, el agresor sacó un arma de fuego y realizó disparos al aire.
Dos meses después, el 21 de octubre, el sobrino llegó nuevamente a Santa Rita de Alajuela, discutió con su tío y le disparó en dos ocasiones, impactándolo en el tórax y causándole la muerte en el lugar.
Las autoridades lograron detener al sospechoso en enero de este año. Tras el juicio celebrado recientemente, el Tribunal Penal de Alajuela le impuso una pena de ocho años, dos meses y quince días de prisión.
En estos casos, las familias afrontan un golpe doble, por un lado, la muete de uno de sus integrantes y, por otra, la sentencia condenaria contra del agresor, que también es parte del grupo familiar.
Otro ocurrió el 15 de noviembre de 1998 cuando tres cuerpos sin vida aparecieron baleados dentro de un Toyota Corona volcado a orillas de cauce del río Virilla.
Esa vez fallecieron José Narciso Montero Valverde (de 35 años), su esposa, Ana Isabel Méndez (de 37) y el hijo de la pareja, José Michael Montero (9), vecinos de San Blas de Moravia. Al inicio se pensó en un ajuste de cuentas, ya que José Narciso había sido condenado a cuatro años de prisión por venta de drogas.
La investigación posterior permitió determinar que no se trató de un accidente, ni de un ajuste de cuentas, sino que una hija de la pareja, de 15 años, había asesinado a sus padres y a su hermano menor. José Narciso estaba en la vivieda, pues aunque descontaba prisión, tenía un beneficio para visitar a su familia los fines de semana.
Según las pesquisas, la quinceañera introdujo los cuerpos al carro con la ayuda del novio, los trasladaron y los despeñaron hacia un río, en la calle El Raicero en barrio El Socorro, Santo Domingo de Heredia.
A la menor se le condenó a 15 años de prisión, de los cuales descontó 10. Su novio fue absuelto por errores en la investigación. Años después, el 17 de setiembre del 2012, la mujer intentó heredar los bienes de las víctimas.
Especial de crímenes y casos judiciales: Triple Crimen de San Blas