Está por llegar la Navidad y escribo sobre una obra literaria que tiene multitud de adaptaciones al cine, al teatro y la televisión. La novela breve de Charles Dickens, Villancico de navidad o mejor conocida como Canción o Cuento de Navidad fue escrita en 6 semanas en 1843 y publicada el 19 de diciembre de ese año por la editorial Chapman & Hall. En cinco días se agotaron los primeros seis mil ejemplares. Y desde entonces, se convirtió en la obra más vendida del autor hasta la fecha, que ha llegado a la cifra de más de dos millones de libros.¿Por qué razón Cuento de Navidad ha sido tan popular? Cumple con el viaje del héroe descrito por Joseph Campbell en su libro El héroe de las mil caras, donde el antropólogo analiza narraciones míticas que se repiten en todo el mundo. Durante una sola noche, el personaje principal, Ebenezer Scrooge, quien es un hombre tacaño, frío e insensible realiza un viaje de iniciación guiado por tres espíritus que lo transformarán. En inglés, el adjetivo mean con el que se le describe tiene dos acepciones: avaro y malo. La acción transcurre en la madrugada entre la Nochebuena y la Navidad. El espectro de su antiguo socio le advierte que esa noche vendrán a visitarlo los espíritus de la navidad pasada, presente y futura, y si no cambia, arrastrará pesadas cadenas por la eternidad. Consecuencia de las terroríficas visitas, Scrooge se hace consciente de que su amargura, su falta de compasión y de generosidad puede costarle caro. La soledad y el olvido eternos serán sus compañeros.Consumada la transformación, Scrooge visita a su empleado, Bob Crachit, y a su hijo, el pequeño Tim, llevándoles un gran pavo para la cena, la noticia de un aumento de sueldo y el pago de servicios médicos para el pequeño que está enfermo, y que, si no se atiende, morirá irremediablemente como lo ha visto en su visión del futuro. El pequeño Tim es la personificación, no sólo de la bondad, sino de la pureza y la fragilidad de la infancia. Esa niñez que Dickens se toma tanto trabajo en configurar como resultado de la Revolución Industrial en Inglaterra y la que él vivió en carne propia a los doce años, cuando, enfrentado a la muerte de su padre, tiene que trabajar largas horas. Una infancia conformada por niños pobres y desamparados, que trabajan de sol a sol en las fábricas, sin asistencia médica.El pequeño Tim pone de manifiesto la diferencia entre el egoísmo de Scrooge y la bondad de aquellos que, a pesar de tener menos recursos, son más generosos en espíritu. También representa las preocupaciones del autor sobre la pobreza, la desigualdad y la importancia de la caridad. Su éxito quizás es una combinación entre un final feliz y una necesidad de esperanza en nuestros corazones en la época “navideña” que se supone debería ser una tregua de reconciliación, unión familiar y alegría, y nos conmueve la transformación del protagonista. Sobre todo, en momentos difíciles por los que pasa el mundo. Feliz Navidad a todos los lectores.AQ
