El congresista Edwin Martínez, anteriormente miembro de la bancada de Acción Popular y ahora parlamentario no agrupado, tiene en su despacho a Isabel Cajo Salvador, una joven de 26 años. Para Cajo, esta no es su primera experiencia laboral en el Congreso de la República. Anteriormente trabajó en la Oficina Legal y Constitucional del Parlamento durante la gestión de Jorge Torres Saravia, señalado como presunto líder de una red de proxenetismo y prostitución en el Poder Legislativo.
Cajo, quien no cuenta con un bachillerato registrado en la Sunedu, recibe un sueldo de S/7.000 por su puesto como secretaria del congresista Martínez. En sus inicios en el Congreso, ingresó al Área de Administración de Bienes con un salario de S/4.700. Pocos meses después, Jorge Torres Saravia la convocó para trabajar en su despacho, donde percibió una remuneración cercana a los S/8.000.
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Según información del semanario Hildebrandt en sus trece, Cajo tiene estudios inconclusos en la Universidad Garcilaso de la Vega, los cuales había mencionado previamente en su perfil de LinkedIn. Además, la joven también se desempeñaba como modelo en la plataforma OnlyFans, donde ofrecía contenido para adultos. Actualmente, tanto su perfil de LinkedIn como su cuenta en OnlyFans han sido eliminados.
Al ser consultado por un reportero del mismo semanario sobre el rol de Cajo en su despacho y su falta de credenciales para el cargo, Martínez respondió: "Fue evaluada por el asesor, y yo di el visto bueno. (...) Yo no vivo de cuentos ni de habladurías. Algunos periodistas se olvidan de que son hijos de una mujer o que tienen hermanas mujeres, y eso es algo que yo quiero reivindicar en esta señorita. (...) Antes de ser político, soy un ser humano. (...) Para el cargo que yo necesito, no se requiere siquiera ser bachiller", afirmó el parlamentario.
Según el seminario Hildebrandt en sus trece, las reuniones organizadas por Jorge Torres Saravia se llevaron a cabo en departamentos alquilados a través de la plataforma Airbnb, ubicados en distritos como Barranco y San Isidro. Entre las direcciones mencionadas figuran el piso 16 del edificio The Modern, en la calle El Sol Oeste 385, y el cuarto piso de un edificio en Dean Valdivia 207. Según los testimonios, estos encuentros se realizaban en espacios seleccionados estratégicamente y reservados con antelación.
Un testigo, que prefirió mantener su identidad en el anonimato por razones de seguridad, declaró al semanario que durante dichas reuniones se solicitaba a los asistentes no presentar ningún documento de identificación, a pesar de que era un requisito en la recepción del edificio. Según el testimonio, Torres Saravia, conocido como 'Coqui', pedía evitar el registro de datos personales. Además, en una conversación entre un gerente parlamentario y Torres Saravia, se dieron instrucciones específicas para ingresar a los departamentos, incluido el uso de cerraduras digitales con clave.
