El AC Milan se reencontró tres semanas después con la victoria en la Serie A al ganar 1 a 0 en el campo del Hellas Verona, este viernes en el inicio de la 17ª jornada del torneo italiano.
En una jornada dificultada por la niebla en Verona, el tanto del triunfo lo firmó una vez más Tijjani Reijnders: perfectamente lanzado en profundidad por Youssouf Fofana, el mediocampista neerlandés anotó en el minuto 56, en el que fue su cuarto tanto liguero desde principios de noviembre.
Pero más allá de ese destello, el Milan hizo de nuevo un partido gris ante un rival en crisis (17º).
El pasado fin de semana, el AC Milan había firmado un decepcionante 0-0 en casa con el Génova, en la víspera del 125º cumpleaños del club.
La victoria de este viernes da algo de calma antes de Navidad pero el equipo sigue lejos de la cabeza: es séptimo, a 11 puntos del líder, el Atalanta.
La imagen en Verona no fue buena y eso tampoco ayuda a tranquilizar a los 'tifosi'.
"Tomamos demasiadas malas decisiones, controlamos el balón demasiado a menudo sin generar peligro para el rival, pero lo importante era ganar este partido. Es un triunfo merecido", estimó el entrenador portugués de los 'rossoneri', Paulo Fonseca.
La noticia más preocupante de la noche para él fue el cambio por lesión a la media hora del atacante portugués Rafael Leao.
Según La Gazzetta dello Sport, la velada se vio también empañada por insultos racistas, que habrían llevado al arquero francés del Milan, Mike Maignan, a quejarse al árbitro.
La pasada temporada, en un partido en el campo del Udinese, Maignan llegó a abandonar momentáneamente el terreno de juego, seguido por sus compañeros, tras escuchar gritos de mono dirigidos a él.
Cinco aficionados fueron entonces vetados de acceder al estadio y el Udinese fue condenado a jugar un partido a puerta cerrada. Ese último castigo fue aligerado tras un recurso y se limitó al cierre de una de las tribunas de su estadio durante dos partidos.
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