El Tribunal Penal de París dictó sentencia en un caso que conmocionó al mundo del fútbol. Mathias Pogba, hermano del campeón del mundo Paul Pogba, fue condenado a 3 años de cárcel, de los cuales dos son prisión suspendida, por su implicación en la extorsión contra el reconocido futbolista luego de su secuestro. Si bien en el rapto no estuvo Mathias, el juzgado sí le consideró un cómplice en el chantaje.
La situación se remonta a marzo de 2022, cuando Paul Pogba fue amenazado por su propio hermano y un grupo de amigos de la infancia, quienes exigieron la exorbitante suma de 13 millones de dólares. El abogado de Mathias, Mbeko Tabula, manifestó que su cliente se encuentra "en estado de shock" y mantuvo su inocencia a lo largo del proceso. La defensa argumentó que el sentenciado fue manipulado y obligado a participar en acciones que estaban fuera de su control. Sin embargo, el tribunal consideró que su culpabilidad y el de sus cómplices es innegable.
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El tribunal no solo condenó a Mathias Pogba, sino también a otros cinco implicados en el caso, quienes fueron amigos de Paul desde la infancia. Todos ellos fueron hallados culpables de "intento de extorsión y conspiración criminal", por lo que enfrentan penas que oscilan entre 4 y 8 años de prisión. Roushdane K., considerado el cerebro del plan, recibió el castigo más severo con 8 años de cárcel.
El escándalo se desató cuando Mathias Pogba publicó un mensaje en redes sociales en el que amenazó a su hermano con revelar detalles de su vida privada, incluido un intento de contratar a un brujo para lanzar un hechizo contra Kylian Mbappé, compañero de Paul en la selección francesa. Este acto fue clave para que el caso saliera a la luz y se iniciara la investigación correspondiente.
La noche del 19 de marzo de 2022, Paul Pogba se encontraba en casa de un amigo cuando un grupo de encapuchados armados irrumpió en la vivienda. Los atacantes amenazaron al futbolista con graves consecuencias si no cumplía con el pago de 13 millones de dólares. Aunque Paul intentó entregar la plata, su banco bloqueó la transacción por motivos de seguridad, lo que complicó aún más la situación.
A pesar de que Mathias no estuvo presente durante el secuestro, el tribunal lo consideró cómplice debido a las presiones y amenazas que ejerció sobre su hermano en las semanas posteriores al incidente.
La sentencia provocó diversas reacciones en el ámbito deportivo y legal. Los abogados de todos los condenados anunciaron su intención de apelar la decisión del tribunal, lo cual podría prolongar el proceso judicial.
