Cientos de familiares reclaman la aparición de los desaparecidos de los que aún se sabe poco y nada.
Un sacerdote católico ha compartido recientemente con el cardenal Daniel Sturla detalles proporcionados por un exsoldado, relacionado con la ubicación de enterramientos de víctimas de la dictadura en el interior del país.
La comunicación, confirmada por Sturla en una entrevista con el diario El País, destaca que la información remitida al cardenal “no es demasiado precisa”, sin embargo, fue entregada a las organizaciones Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos.
La información recabada fue rápidamente transferida a la Institución Nacional de Derechos Humanos (Inddhh), la cual ha comenzado a realizar un análisis exhaustivo de los datos recibidos.
Este esfuerzo forma parte de un proyecto que, respaldado por la Iglesia Católica, se puso en marcha en agosto de este año, y que tiene como objetivo la recolección de información sobre lugares de posibles enterramientos de detenidos desaparecidos durante el periodo de la dictadura en Uruguay.
La información recabada fue rápidamente transferida a la Institución Nacional de Derechos Humanos (Inddhh), la cual ha comenzado a realizar un análisis exhaustivo de los datos recibidos. Este esfuerzo forma parte de un proyecto que, respaldado por la Iglesia Católica, se puso en marcha en agosto de este año, y que tiene como objetivo la recolección de información sobre lugares de posibles enterramientos de detenidos desaparecidos durante el periodo de la dictadura en Uruguay.
La Conferencia Episcopal del Uruguay, encabezada por el presidente Arturo Fajardo, ha manifestado que toda información que se presente será “bienvenida y acercada”. Esta disposición de los obispos refleja un interés genuino por la veracidad y recuperación de la memoria histórica de las víctimas, atendiendo a las solicitudes de las familias afectadas.
El cardenal Sturla destacó que muchas veces las personas se sienten más cómodas comunicando esta información a los sacerdotes, que es un acto de confianza que no necesariamente se enmarca en una confesión. “El sacerdote puede anotar los datos que le brindan y se los da al obispo para unificar el contacto con familiares o la comisión”, explicó Sturla, enfatizando la importancia del papel que pueden jugar en este proceso.
Wilder Tayler, uno de los directores de la Inddhh, también confirmó la recepción de esta nueva información y calificó como un “éxito” la respuesta obtenida gracias a la colaboración de la Iglesia en el marco de esta iniciativa. La acción se desarrolla dentro de un contexto de diálogo y colaboración entre diversas instituciones en busca de esclarecer el destino de los desaparecidos durante la dictadura.
Este proyecto ha sido impulsado por el Observatorio del Sur, un centro que promueve la investigación, la documentación y la acción social desde una perspectiva cristiana ecuménica. Una de las figuras clave en esta iniciativa es Nelson Villarreal, ex titular de la Secretaría de Derechos Humanos de Presidencia, quien recientemente se reunió con Sandra Lazo, la nueva ministra de Defensa del futuro gobierno de Yamandú Orsi, quien expresó su interés por los avances en esta causa.
Desde que se anunció su nombramiento, Lazo ha reiterado su compromiso de avanzar en la política de búsqueda de restos desaparecidos, lo que eleva aún más la relevancia de estos esfuerzos en un contexto social y político que sigue sensible a las heridas del pasado.
