Nueve taludes ubicados en rutas de la red vial nacional consideradas “estratégicas” fueron catalogados de alto riesgo, de acuerdo con un informe elaborado por el Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales (Lanamme) que analizó más de 700 puntos susceptibles a deslizamientos en 54 rutas con características de montaña.
De acuerdo con ese informe, esa categorización comprende el nivel de afectación y la incidencia sobre estructuras cercanas; significa que requieren de análisis profundos con exploración geotécnica y equipos especializados para determinar las intervenciones a realizar.
El documento agrega que en ese mismo análisis se hallaron 10 taludes en categoría baja y 39 en categoría media. De estos últimos, 19 recibieron recomendaciones para manejo de escorrentía superficial y control de erosión.
Según el Lanamme, en la red vial estratégica se encontraron 730 sitios que muestran signos de erosión debido a la influencia del inadecuado manejo de agua de escorrentía superficial y 642 deslizamientos.
Además, se hallaron 225 sitios con material acumulado al pie del talud, 28 taludes con grietas en su cara, 25 sitios con estructuras de retención, 23 taludes con bloques de roca acumulados al pie o sobre la ruta y 9 sitios que muestran hundimientos en la carretera generado por la acción de un movimiento del terreno.
Las rutas que presentan mayor cantidad de puntos con afectaciones o riesgos de deslizamiento son la 32 (entre San José y Limón), la 237 (en Coto Brus), la 142 (entre La Fortuna y Tilarán) y la Interamericana Sur o ruta 2.
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En la llamada red vial complementaria, se identificaron 37 taludes con la categoría baja, 48 con la media y seis en alta. Tras el análisis detallado de los puntos, se concluyó que 59 recibieron recomendaciones para manejo de escorrentía superficial y control de erosión, y 34 en estas rutas requieren un análisis profundo con un modelo de elevación digital.
En esta clasificación de la red vial, se hallaron en total 1.029 sitios que muestran signos de deslizamientos, 767 presentan erosión debido mayormente a la influencia del inadecuado manejo de aguas, 210 sitios tenían material acumulado al pie del talud, 81 taludes presentaban grietas en su cara, 16 sitios con estructuras de retención, 13 taludes con bloques de roca acumulados al pie o sobre la ruta y 7 sitios que muestran hundimientos en la carretera.
Las vías con mayor cantidad de hallazgos en esta categoría son las rutas 313 (que comunica con Bajos del Toro en Alajuela), 301 (entre Parrita y Acosta), 606 (carretera a Monteverde) y 209 (Acosta-Palmichal).
El Lanamme también destacó que en el caso de la ruta 32 se han emitido varios informes de seguimiento en los últimos años, a partir de los cuales se determinó que al menos seis de los puntos evaluados desmejoraron su condición, otros tres mantienen el estado y uno de los puntos mantiene la condición pero presenta caída de material.
Además, señala el documento, siete se revegetaron y otros cuatro se revegetaron pero aumentaron sus niveles de erosión o presentaban caída de material.
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Según el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi), el “Programa de Emergencia para la Reconstrucción Integral y Resiliente de Infraestructura” (Proeri), que se atenderá con recursos del Banco Centroamericano de Integración Económica, destinará $347 millones para la atención de 84 puentes y 87 puntos en rutas nacionales propensos a deslizamientos. De esos recursos, alrededor de $35 millones serán dedicados exclusivamente para la atención de la ruta 32.
