A solo siete horas de la CABA, emerge un destino poco conocido de la Costa Atlántica. Sus playas, consideradas las más anchas de Buenos Aires, ofrecen un refugio ideal para quienes desean desconectarse del ritmo urbano.
Ubicada en el partido de Tres Arroyos, Dunamar combina naturaleza, baja afluencia turística y un entorno sereno imperdible para una escapada o unas vacaciones inolvidables.
A 570 kilómetros de la CABA, Dunamar se alza como un destino único de la Costa Atlántica. Separada del balneario Claromecó por el Arroyo Claromecó, esta localidad bonaerense combina playas de generosas dimensiones con un entorno natural que invita al descanso.
Lo que hace especial a este rincón bonaerense no es solo su tranquilidad, sino su estrecha conexión con la naturaleza. Detrás de sus dunas se extiende un bosque de 500 hectáreas, un pulmón verde diseñado por Ernesto Gesell y mantenido hasta hoy por la familia Fangauff-Gesell.
Dunamar, a 570 km de la CABA, ofrece playas amplias y un entorno natural ideal para descansar (Fuente: @dunamar.com.ar / Instagram)
Este ecosistema, que combina tamariscos y acacias frente al mar con pinos y eucaliptos hacia el interior, ofrece un paisaje que alterna entre zonas densas y áreas abiertas, ideal para disfrutar de caminatas, cabalgatas o simplemente relajarse bajo su sombra.
Dunamar mantiene su esencia serena a pesar de haber mejorado su infraestructura turística. Sus opciones de alojamiento incluyen casas y cabañas que brindan confort a quienes desean explorar este destino sin renunciar a la calma.
Las playas, con aguas templadas y poca profundidad, son perfectas para familias, mientras que actividades como kitesurf, pesca deportiva y paseos en cuatriciclo agregan un toque de aventura.
Dunamar está situada a apenas 3 kilómetros del centro de Claromecó, lo que convierte el acceso a este rincón de la Costa Atlántica en una tarea sencilla. Desde la CABA, se puede llegar en auto en aproximadamente 6 horas y 50 minutos por la Ruta Nacional 3.
Para conectar ambas localidades, se encuentran disponibles el puente colgante peatonal que cruza el arroyo Claromecó y el puente vehicular "Ernesto Fridolin Gesell".
